
Si algo caracteriza al colectivo del Instituto de Biotecnología de las Plantas (IBP) de Villa Clara es desplegar esas neuronas intranquilas más allá de los cultivares de papa, plátanos y bananos, para que el destino de las investigaciones redunde en el desarrollo científico y productivo del país.
Quizás resulte la premisa básica del centro, que transita por sus 25 años de fundado a partir de una idea de Fidel destinada al desarrollo de investigaciones encaminadas al mejoramiento genético de las plantas, sin abandonar la producción de semillas de alta calidad.
Hoy se mira la senda transitada en busca de una agricultura sostenible y para su director, el Doctor en Ciencias Osvaldo Fernández Martínez, se siente el orgullo de los resultados alcanzados por estudiantes, investigadores y profesores formados en el campo de la biotecnología vegetal.
Adscrito a la Universidad Central «Marta Abreu » de Las Villas (UCLV), enel camino ha encontrado retos y obstáculos desde que un grupo de investigadores de la Facultad de Ciencias Agrícolas, junto al primer director del IBP, el doctor Juan Nivaldo Pérez Ponce, delinearon esos sueños que ya permiten el crecimiento constante de la actividad científica y comercial, con ingresos significativos por concepto de ventas en el mercado nacional e internacional.

El IBP mantiene su mirada en la generación de productos competitivos de alto valor agregado que surgen del proceso de innovación tecnológica, mas las diversas líneas le permiten incursionar en el café, con el desarrollo y propagación de híbridos caracterizados por su alto potencial productivo, en las acciones con especies forestales que resultan difíciles de propagar, o en variantes de plantas ornamentales de alto costo en la palestra foránea.
Fernández Martínez subrayó que los perfiles fundamentales aparecen vinculados al impacto económico y a la vez ecológico, pues no descuidan el punto de vista de la percepción ambiental. También priorizan la embriogénesis somática en plátanos y bananos, como una opción eficiente de semillas de calidad superior, junto a otros cultivos de importancia agrícola.
Por esta vía ya se trabaja en la producción de posturas de café, labor que influirá, sobremanera, en la recuperación de este cultivo, severamente dañado por los huracanes. El inicio está previsto para el año venidero por la zona oriental del país.
Es de primer orden la cartera de fondos exportables y la sustitución de importaciones. Vale decir que durante los últimos tres años los ingresos superan los 100 000 dólares por concepto de exportaciones, a pesar de constituir un centro pequeño cuya plantilla oscila entre 100 y 104 trabajadores, de ellos una veintena de investigadores.
Durante la celebración por el aniversario 25 se reconocieron a los fundadores, jubilados y a los que ya no están, y fueron leídos mensajes de varios integrantes que dejaron su capítulo a lo largo de la historia del IBP.
El doctor Andrés Castro Alegría, rector de la UCLV, significó en las palabras de elogio que este centro fue el último sitio perteneciente a la casa de estudios villaclareña, que contó con la presencia del líder histórico de la Revolución Cubana.
Representantes de organismos internacionales, de las principales instituciones afines del país, y de las organizaciones de la provincia se integraron al agasajo de una institución que no admite el descanso.