MINSK.— «Tienen que saber que están visitando a sus amigos, y más que amigos; y si algo podemos hacer para el pueblo cubano, para Cuba, sin duda alguna lo vamos a hacer», expresó el presidente de la República de Belarús, Alexander Lukashenko, al primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, tras darle la bienvenida oficial en el Palacio de la Indepedencia.
El estadista caribeño llegó la mañana del miércoles, hora local, a la capital de esta nación para una visita oficial y participar en el Consejo Supremo de la Unión Económica Euroasiática.
Durante las conversaciones oficiales, Díaz-Canel transmitió a Lukashenko un salud afectuoso del líder de la Revolución cubana, General de Ejército Raúl Castro Ruz, y felicitó al dirigente bielorruso por la victoria en las recientes elecciones, «una demostración —le dijo— de la autoridad política y el contundente respaldo popular a su gestión».
En la inauguración de las conversaciones, Lukashenko enfatizó que Belarús y Cuba tienen «todo para avanzar: la voluntad política, la comprensión mutua, el apoyo a nivel de Jefes de Estado, y, lo más importante, un largo camino de cooperación».
«Estamos listos para continuar un diálogo abierto y sincero con pasos conjuntos que van asegurar la estabilidad social y económica de nuestros países y el incremento del bienestar de nuestros ciudadanos», señaló el estadista, quien aseguró que no se ha olvidado de su promesa de visitar Cuba, un país —dijo— «tan cálido en todos los sentidos».
El presidente cubano destacó la contribución personal de su colega al desarrollo y consolidación de las relaciones bilaterales y su empeño en buscar soluciones a los problemas y dificultades que se han encontrado para avanzar, como el acuerdo de intercambio compensado, que marcha de buena manera, calificó.
Exaltó las profundas e históricas relaciones de amistad y cooperación bilaterales, basadas —dijo— en el respeto y beneficio mutuo. Son vínculos —añadió— de países y pueblos hermanos.

El mandatario antillano ponderó la voluntad política y el deseo de las dos naciones por consolidar sus lazos, especialmente en la esfera económico, comercial y de cooperación, las que fueron acelaradas durante los intercambios en 2023 y 2024 entre los primeros ministros de ambos países, recordó.
Resaltó el alto nivel de las relaciones interparlamentarias, con intercambios permanentes. Traigo la encomienda del presidente de nuestra Asamblea Nacional, Esteban Lazo, de ratificar la invitación que hizo a su colega, Natalia Kochanova, de visitar Cuba, expresó Díaz-Canel a Lukashenko.
Cuba siempre puede contar con Belarús
El presidente de Belarús recordó el encuentro con su colega cubano el pasado 9 de mayo, en Moscú, durante las celebraciones por el 80 aniversario de la victoria sobre el fascismo, y se congratuló porque ahora «mi amigo Díaz-Canel» esté en Minsk en su segunda visita oficial a la nación.
«Vamos a discutir los temas más importantes de la cooperación bielorrusa-cubana y de la agenda internacional; sin olvidar que uno de los objetivos de su participación en esta visita es la participación en el Foro Económico Euroasiático y en la sesión plenaria de la sesión del Consejo Supremo de la Unión Económica Euroasiática», refirió.

«Hoy —reflexionó Lukashenko— el mundo está atravesando etapas de mucha turbulencia, y mientras las estructuras obsoletas están frenando las nuevas estructuras, todavía estas no tienen el recurso para superar la crisis e incluso ganar en esa crisis. Tenemos que trabajar de conjunto sobre eso», enfatizó.
«Entre los pueblos bielorruso y cubano —reiteró el mandatario— existen sólidas relaciones de hermandad, que están consolidadas por sus jefes de Estado. En persona de mi estimado colega Miguel Díaz-Canel —dijo— hemos obtenido un verdadero amigo del pueblo bielorruso, y estoy seguro que el carácter cálido, de unión de nuestro diálogo, se va a conservar por mucho tiempo y las nuevas generaciones van a mantenerlo y llenarlo con el contenido actual».
Al abordar la interacción en la arena internacional, Lukashenko enfatizó que «nuestros países comparten posiciones comunes y se brindan un apoyo incondicional» y reiteró la condena al bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de los EE. UU., «una presión ilegal que no se afloja, sino que se incrementa», denunció.
Sin embargo —aclaró— «los factores negativos externos nos estimulan a la búsqueda de soluciones efectivas», como está haciendo —explicó— la comisión conjunta para la cooperaciónn económica y comercial que ha mantenido su ritmo anual y habla del interés de ambos países en la consolidación de la cooperación.
El presidente de Belarús comentó sobre la complementariedad que están construyendo las dos naciones en esferas estratégicas como el abastecimiento de productos a Cuba para garantizar la seguridad alimentaria, la modernización de las industrias de la Isla, como la de la construcción, del transporte, de la energía y la extracción de minerales, así como la ampliación del acceso de la población cubana a medicamentos de calidad producidos en Belarús.
También —sumó— «vemos buenas perspectivas para el incremento de nuestro trabajo en la producción conjunta de maquinaria agrícola, especialemente tractores, e implementos para estas. «Estamos listos, Señor Presidente, para asegurar los suministros de nuevas maquinarias utilizando los mecanismos de contrato tipo leasing para los talleres de reparación en Cuba. Podemos asegurar las exportaciones de motores, de repuestos, así como máquinas herramientas y equipos», aseguró Lukashenko a Díaz-Canel.
«Además del sector industrial, podemos suministrar materia primas y compartir nuestras experiencias y tecnologías para la producción conjunta de leche y productos lácteos», añadió el Jefe de Estado al recordar la validez de los suministros de productos a Cuba a través del esquema de créditos del Banco de Desarrollo de Belarús.
«Hoy en día —afirmó— estamos hablando de leche en polvo, de maquinaria, pero nuestra parte está interesada en ampliar esa nomenclatura. Y estoy seguro —enfatizó— que los resultados de esta reunión nos permitirán elaborar efectivas soluciones y las vamos a cumplir de manera precisa».
Consensos y potencialidades
En sus palabras en el inicio de las conversaciones oficiales, el presidente Miguel Díaz-Canel Bermúdez abordó los mecanismos económicos comerciales que se han ido creando a partir de los consensos alcanzados, y que se afianzan como un mecanismo primordial para el impulso de las relaciones.
Entre los ejemplos de la creciente colaboración citó, entre otros, el éxito en el ensamblaje de tractores MTZ en la Empresa Mecánica Héroes del 26 de Julio, de Holguín. Habló también sobre los documentos firmados en mayo pasado durante la XII Comisión Intergubernamental, celebrada en La Habana, como los acuerdos interbancarios, comerciales y empresariales.
Especial énfasis puso en los resultados en el sector de la biotecnología y la farmacéutica, incluyendo ensayos clínicos de vacunas cubanas y el registro en la Isla de alrededor de medio centenar de productos farmacéuticos bielorrusos, aunque señaló que aún se tienen grandes potencialidades, por lo que detalló otros proyectos a desarrollar, como la transformación de instalaciones para producir medicamentos oncológicos e inmunológicos.
Díaz-Canel ponderó los resultados de los mecanismos de intercambio compensando que se han logrado y que han permitido el suministro de leche en polvo a Cuba, «muy importante para cubrir una parte de este producto en la canasta básica», expresó.
El presidente cubano explicitó el interés de continuar potenciando el comercio bilateral de bienes a través de mecanismos de compesacion, porque —explicó— las exportaciones entre ambos países aún es limitada. También exhortó a una mayor participación de las empresas de Belarús en el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta 2030 de Cuba, entre otras iniciativas.
Declaraciones a la prensa
Al término de las conversaciones oficiales, los presidentes Miguel Díaz-Canel y Alexander Lukashenko hicieron declaraciones a la prensa en la que resumieron los intercambios y las potencialidades que aún tienen ambas naciones en el área económica y comercial.

«En el día de hoy, de conjunto con Miguel, hemos intercambiado un gran abanico de puntos de nuestra agenda. Hemos encaminado pasos para avanzar en la cooperación. Hemos prestado atención a una compleja coyuntura internacional, y sobre la contribución que podemos hacer a un mundo multipolar y justo», señaló el anfitrión.
Nosotros, señaló Lukashenko, estamos listos para introducir en la economía cubana avances tecnológicos y científicos para cumplir de manera conjunta con los proyectos bilaterales, de largo alcance y que priorizan el aspecto social.
El presidente de Belarús agradeció a su par cubano por la visita oficial, que —dijo— ratifica «el muy alto nivel de nuestras relaciones», y enfatizó que «todos los planes y acuerdos que hemos alcanzado y vamos a alcanzar, lo vamos a cumplir estrictamente».
El presidente cubano calificó como hito los diálogos y resultados de su nuevo encuentro con Lukashenko, los que —explicó— están basados en los tradicionales lazos de amistad y respeto entre nuestros pueblos y gobiernos.
Belarús —dijo— «es una nación y un pueblo admirado y querido por la nación y el pueblo cubano» y el encuentro con nuestro querido presidente Lukashenko ha permitido dar continuidad a los intercambios de alto nivel que han caracterizado nuestros vínculos.
Díaz-Canel destacó «la comprensión, la sensibilidad, la voluntad y la disposición del presidente Lukashenko y la delegación oficial que participó en las conversaciones, para trabajar junto con Cuba y apoyar a Cuba en medio de la difícil situación que vivimos».
El mandatario antillano se refirió a la amplia agenda bilateral abordada y temas en los que debe continuarse trabajando para fortalecer los vínculos en mutuo beneficio, especialmente en sectores como la industria, la agricultura, la producción de alimentos, la biofarmacéutica, la construcción, el turismo, el deporte, la educación y la ciencia, entre otros. (René Tamayo León)