Aun cuando en las últimas semanas, la compleja situación epidemiológica lo ha llevado a modificar parte de su agenda y volcarse al enfrentamiento a la COVID-19, el Gobierno en Cuba está vivo, preocupado y ocupado de todos los asuntos del país.
Así lo afirmó el miembro del Buró Político y primer ministro, Manuel Marrero Cruz, durante su comparecencia en el programa televisivo Mesa Redonda.
A pesar del reforzamiento de las medidas sanitarias, luego de que todas las provincias pasaran a la fase de transmisión comunitaria de la enfermedad, explicó que se ha continuado el chequeo de los programas, macroprogramas y demás cuestiones priorizadas. «Estamos trabajando y buscando soluciones », afirmó.
La situación energética transita hacia la estabilización
En un primer momento de su intervención, Marrero Cruz se refirió al tema energético, al cual aseguró que se le da un seguimiento diario por parte del Gobierno.
Al respecto, informó que la unidad número uno de la termoeléctrica de Felton, diseñada para generar 260 megawatts (mw), realizó su primera sincronización luego de su rehabilitación capital, y se encuentra en proceso de prueba y ajuste.
Ya se incorpora a aportar al sistema. Se estima completar los ajustes esta semana y que alcance toda su capacidad, aseveró.
Por otra parte, señaló que este martes sincronizó al Sistema Eléctrico Nacional (SEN) la termoeléctrica Antonio Guiteras, con una capacidad de 280 mw. La misma arrancó entregando
234 mw, lo que ya tiene un impacto importante en el SEN y pone al país en una posición más ventajosa.
El Primer Ministro añadió que, en el mes de agosto, se estima realizar la primera sincronización de la unidad seis de la termoeléctrica Máximo Gómez, de Mariel, que incorporaría 100 mw más.
A partir de la activación de la Guiteras y la unidad uno de Felton, las afectaciones al servicio por déficit de capacidad de generación están disminuyendo de una manera apreciable, aunque advirtió que todavía pueden ocurrir en determinado momento.
«Este es un proceso que debe ir hacia una mejora continua y hacia la estabilización, pero todavía no podemos decir que está totalmente solucionado », apuntó.
Para garantizar que no haya apagones, se requieren, de manera permanente, 500 mw de reserva, que permitan dar cobertura si una de las grandes termoeléctricas fallara de momento. Si es menor, ante cualquier avería que exista en medio de la prestación del servicio, pueden empezar a surgir afectaciones, detalló.
Por ello, expresó que es necesario continuar arduamente con todo el proceso de reparación y puesta en marcha de todo el equipamiento que se encuentra paralizado.
Aunque todavía siguen ocurriendo apagones, con la entrada de las nuevas plantas estos han disminuido significativamente, sobre todo en el horario de la noche y la madrugada.
Esta tendencia debe mantenerse e, incluso, mejorar, en la medida en que Felton logre su máxima capacidad, aseveró Marrero Cruz.
Reiteró que el Gobierno mantiene la política de evitar afectaciones al servicio a la población. «Nunca estaremos satisfechos con los apagones ».
Otras acciones para atenuar la situación serían tensar los mecanismos de comunicación y que en cada territorio se informe a la población de las posibles afectaciones que puedan ocurrir en el día, para que pueda organizarse.
Aparte de las grandes centrales generadoras de energía, el dirigente recordó que existe una infraestructura considerable a partir de las baterías de grupos electrógenos. Por diferentes causas, la disponibilidad de esos equipos ha disminuido por roturas y falta de baterías.
En este sentido, aseguró que se ha hecho un esfuerzo para la adquisición de los recursos necesarios y la reactivación de esos grupos.
Esto permitirá mejorar también el abasto de agua en algunas comunidades, pues aunque las estaciones de bombeo están previstas entre los circuitos priorizados, hay algunas que no se hallan cubiertas.
De manera general, podemos decir que la situación energética nacional transita hacia la estabilización, pero pueden existir afectaciones porque tenemos un sistema de generación que presenta vulnerabilidades, agregó.
Por ello, recalcó la necesidad del ahorro para contribuir a esa estabilidad que hoy se busca.
Al cierre de agosto, el 80 % de la población tendrá al menos una dosis de la vacuna
El Primer Ministro cubano también se refirió al proceso de vacunación contra la COVID-19 que se lleva a cabo en varias provincias cubanas.
Sobre el mismo, precisó que desde mayo se comenzó la entrega de dosis al Minsap. Ese mes fueron 3,4 millones; en junio, 4,8, y en julio deben ser cerca de seis millones de dosis que permiten avanzar.
Hasta el 12 de junio se habían aplicado 7 618 028 dosis en total, con las cuales se ha completado el esquema en 1 926 776 personas.
En tanto, 2 617 942 han recibido dos dosis y a 3 073 310 se les ha puesto una.
Marrero Cruz explicó que han existido algunos baches a partir de situaciones que se han presentado. «Producir vacunas depende de insumos y ha habido proveedores que nos han dilatado el proceso de entrega de algunos recursos », reveló.
No obstante, afirmó que Cuba supera la media mundial del porciento de personas que han recibido al menos una dosis, a pesar de las dificultades que se han presentado.
Unido a esto, el país ostenta la tasa más alta de personas vacunadas diariamente por cada cien habitantes. El avance ha estado marcado por la complejidad de la COVID-19 en determinados territorios, dijo.
Se han ido tomando decisiones de prioridades, pero todo el mundo va a ser vacunado. Al cierre de agosto, estimó que alrededor del 60 % de los cubanos estarán vacunados con el esquema completo, y un 80 % de la población tendrá al menos una dosis.
Por tanto, no debe existir dificultad para ratificar el compromiso de que los habitantes de La Habana estén totalmente inmunizados con las tres dosis en el mes de julio, y que todos los cubanos lo estén antes de que concluya el año.
Respecto a la preocupación que han manifestado muchos padres, afirmó que en el mes de septiembre se iniciará la vacunación masiva de los niños de tres a 18 años.
«Producir vacunas no significa apretar un botón. Es un proceso. Antes hay que adquirir insumos, materias primas, pero estamos avanzando en ese camino ».
Se toman medidas para sortear el déficit de medicamentos
Otro de los temas abordados por el Primer Ministro en su intervención fue el déficit de medicamentos. El cuadro básico aprobado por el Minsap
está compuesto por 619 fármacos, de los cuales 254 son importados y 365 son producidos por la industria nacional, aunque ello no quiere decir que no requieran materias primas importadas, detalló.
A su juicio, la escasez de divisas ha hecho que haya una falta en toda la red del país. Los productos más afectados han estado relacionados con los antihipertensivos, antibióticos, analgésicos, ansiolíticos, los anticonceptivos, vitaminas y productos de uso estomatológico, agregó.
«Esa baja disponibilidad de medicamentos tiene una relación directa con la baja disponibilidad de financiamiento. Pero no solo ha sido esta causa.
«Hay materias primas que los proveedores de muchos años nos han dicho que, debido a las nuevas medidas del Gobierno de Estados Unidos se ven imposibilitados de garantizarnos los envíos ».
Marrero Cruz señaló que las acciones del bloqueo y la necesidad de reorientar la adquisición de determinados insumos hacia otros mercados, han significado un incremento en los costos de entre un 30 % y un 50 %. «Y así muchos se empeñan en tratar de vender esa matriz de opinión de que en Cuba no hay bloqueo », afirmó.
El Primer Ministro informó que se ha realizado un gran esfuerzo para adquirir un nivel importante de materia prima para la producción de medicamentos.
Se han importado insumos en función de asegurar las necesidades para continuar enfrentando la COVID-19. También es una prioridad el resto de la red hospitalaria y de farmacias con antibióticos, medicamentos para hemodiálisis, hipertensos, diabéticos y los pacientes de Oncología.
«Las medidas adoptadas van a minimizar el impacto. Todavía no podemos decir que habrá una estabilidad en el suministro de medicamentos, pero continuaremos priorizando este asunto », resumió.
Alimentos, aseo y medicamentos, sin límites de cantidad ni aranceles de Aduana
En su comparecencia en la Mesa Redonda, el dirigente dio a conocer la decisión de dar un nuevo tratamiento arancelario a la importación de alimentos, aseo y medicamentos por las personas naturales.
Sobre el tema, explicó que se autoriza, excepcionalmente y con carácter temporal, la importación, como equipaje acompañante de los pasajeros, de alimentos, aseo y medicamentos, sin límites de cantidad y libres de pago de aranceles.
«Esto quiere decir que una persona puede traer la cantidad de alimentos, productos de aseo y medicamentos que desee. El límite no lo pone el país o la Aduana, sino la aerolínea en que viaje », apuntó.
Dijo, además, que para hacer uso de ese beneficio, deben estar diferenciados esos productos en el equipaje. Es decir, que no se encuentren mezclados con otras pertenencias.
Inicialmente, la medida –que entrará en vigor el lunes próximo– estará vigente hasta el 31 de diciembre, y luego se hará una nueva valoración sobre ella.
«Se mantienen las regulaciones establecidas por las autoridades fitosanitarias y veterinarias, para determinados productos que pueden implicar riesgos de introducción de enfermedades que afecten la salud de las personas, animales o plantas », advirtió Marrero Cruz.
El nuevo tratamiento arancelario no incluye a los viajeros que arriben por los aeropuertos de Varadero o Cayo Coco, los cuales seguirán sujetos a las medidas adoptadas recientemente, relacionadas con el control sanitario de la COVID-19, y solo podrán portar una maleta.
Las adversidades no nos detienen
El Primer Ministro se refirió a que existen en el país personas que residen en provincias distintas al lugar donde están registradas y, por tanto, no disponen de libreta de abastecimiento para acceder a la canasta familiar normada.
«Las restricciones a que ha llevado la COVID-19 han implicado que ahora no tengan movilidad, ni la posibilidad de adquirir esos productos por otras vías ».
Se trata, según dijo, de una cantidad considerable, que puede estar por el orden de las 300 000 personas.
Los gobiernos hemos respetado el derecho de nuestros ciudadanos a residir donde quieran, pero también tenemos el deber de organizar ese proceso para evitar que traiga consecuencias adversas que generen problemas, como este caso de la adquisición de los alimentos normados, señaló.
Al respecto, comentó que hay un grupo de trabajo encabezado por el Vicepresidente de la República, para actualizar las normativas vigentes sobre la emigración dentro del territorio nacional.
No obstante, para atender la situación de esas personas que hoy se encuentran residiendo en otra provincia que no es donde están registradas, se ha buscado una solución común.
«Estamos previendo hacer una implementación por los gobiernos, de conjunto con el Ministerio del Comercio Interior, de un mecanismo provisional que garantice que quienes están en esa situación, puedan adquirir la canasta básica ».
Para ello, el procedimiento se irá implementando gradualmente, y empezará por un primer paso de localizar a las personas, ver dónde están registrados, hacer una cancelación temporal de la libreta de abastecimiento en el lugar de origen, y habilitar un mecanismo para entregarle un documento que le permita adquirir la canasta normada.
Es un fenómeno que se da, fundamentalmente, en La Habana, pero también está presente en varias ciudades, aseveró.
Marrero Cruz ratificó que, a pesar de que el coronavirus ha impactado en la agenda del Gobierno, continúa la implementación de la Estrategia económico-social y la elaboración de un grupo de políticas que van dando respuesta a todos los problemas que tenemos en la sociedad.
«Las adversidades –dijo– no nos detienen ».