
A pocos días del fallecimiento del comisionado nacional Ernesto Reynoso, el béisbol sufre hoy miércoles 12 de mayo, otra pérdida irreparable, pues ha muerto Higinio Vélez Carrión, el presidente de la Federación Cubana de Béisbol, desde junio de 2008.
Nacido el 27 de julio de 1946 en Songo de la Maya, Santiago de Cuba, Higinio fue amado por muchos seguidores del deporte de las bolas y los strikes y también cuestionado por otros, pero nadie puede dudar que fue un mentor ganador.
Se acercó a la pelota desde muy pequeño gracias a su padre, y a partir de ahí, el béisbol fue su vida hasta este miércoles cuando no pudo ganar su último partido después de batallar durante varios días contra las complicaciones derivadas de la COVID-19 que terminaron por causarle la muerte pese a los esfuerzos de los especialistas que le atendieron en el hospital Dr. Luis Díaz Soto.
Y cuando les decía que fue un mánager exitoso, no lo señalaba con exageración. Bajo el mando de Higinio nuestras selecciones ocuparon un lugar en el puesto de premiaciones en casi todos los certámenes foráneos.
Su primer triunfo internacional en un evento de envergadura fue en los Juegos Panamericanos de Indianápolis 1987, título que volvió a disfrutar en la justa continental de 2003. Salió también por la puerta ancha en la Copa Intercontinental efectuada en nuestro país en 2002.
En torneos aún más importantes, Higinio guió al conjunto de la Mayor de Las Antillas a la coronación en las Copas del Mundo de 2001, 2003 y 2005. Un año antes había disfrutado la gloria olímpica en Atenas 2004.
Particularmente considero que su mayor éxito fue la medalla de plata conseguida en el Clásico Mundial de 2006. No solo lo catalogo su mayor logro, sino también en la historia beisbolera de nuestro país, por las características de aquella lid, en la que los criollos enfrentaron peloteros de mucha clase.
En los torneos de casa también registró una larga cadena de triunfos con cuatro trofeos (1988-1989, 1998-1999, 1999-2000 y 2000-2001), además de igual número de subcampeonatos y dos terceros lugares.
Solamente el pinareño Jorge Fuentes, con cinco lauros se sitúa por delante de Higinio que comparte con Ramón Carneado con cuatro gallardetes, el trío de mentores más triunfadores en nuestra pelota.
El número de títulos de Higinio todavía es más abundante si le agregamos los tres que alcanzó en las desaparecidas series selectivas y en dos Copa Revolución (1996 y 1997).
Por si fuera poco, el que fuera presidente de la Federación Cubana de Béisbol en los últimos 13 años, con las tres coronaciones consecutivas que alcanzó desde 1998-1999, 1999-2000 y 2000-2001, empató con Pedro Jova la racha de cetros sucesivos, quedándose a uno de empatar los cuatro de Ramón Carneado.
Aparte de ser un director ganador, a Higinio le tocó comandar la Dirección Nacional de nuestro principal pasatiempo nacional entre 2007 y 2014, y luego ocupó el cargo de presidente de la Federación Cubana en los tiempos más difíciles de la pelota en el país.