
Después de mis recientes comentarios en ediciones anteriores sobre las hazañas de Manuel Cocaína García y Agapito Mayor, vale la pena recordar algunos de los lanzadores zurdos oriundos del territorio que hoy ocupa Villa Clara, pues aquí han existido en diferentes épocas excelentes serpentineros de esa mano, muchos de ellos lamentablemente olvidados.
A Cocaína García y Agapito Mayor se suma el caibarienense Daniel Parra, quien actuó en tres campeonatos mundiales de béisbol aficionado y, en uno de ellos, el 10 de septiembre de 1942, pintó de blanco a Estados Unidos (17-0).

También, Ángel Catayo González, de La Movida, que del 28 de julio al 8 de septiembre de 1946 eslabonó una cadena de 55 entradas consecutivas sin permitir anotaciones.
Luego de instauradas las series nacionales, no se puede dejar de mencionar a uno de sus fundadores Román Águila (Telo), quinto serpentinero en conquistar 20 victorias o más en nuestro principal pasatiempo en ese entonces; únicamente antecedido por Manuel Hurtado (32), Gaspar Curro Pérez (24), Manuel Alarcón (22) y Maximiliano Reyes (20).
Otro de los buenos, Carlos Manuel Gálvez, el zurdo de Jicotea, posee la primacía de más entradas sucesivas sin conceder boletos y comparte el récord de juegos iniciados (26) con Walfrido Ruiz (IND) y Yosvani Torres (PRI), y el de lechadas (8) con Santiago Changa Mederos (IND) y Norge Luis Vera (SCU).
Dos zurdos de Vueltas impactaron entre finales de los 60 y los años 70: Leonel García Cartaya y Aniceto Montes de Oca; curiosamente, ambos cerraron sus expedientes beisboleros con 71 sonrisas. El primero, con 2.34, presenta el mejor promedio de carreras limpias entre los tiradores villaclareños que han rebasado las 1000 entradas de actuación en las series nacionales.
Dueño de una endemoniada curva, considero que Leonel mereció alguna vez formar parte del equipo Cuba, pero eran los tiempos en que al elenco nacional generalmente solo llevaban a un zurdo, y ese espacio casi siempre se lo reservaban al difunto Santiago Changa Mederos.
En la XII Serie (1973), Changa, con balance de 10 y 4 y 1.47 de efectividad, no integró el plantel criollo a la Serie Mundial celebrada ese año en nuestra isla, y en su lugar escogieron a Mario Fernández (MIN), quien tuvo saldo de 8 y 14 y una efectividad de 2.66 en la mencionada contienda.
Me pregunto entonces cómo es posible que, en ausencia de Changa, el desaparecido monticulista santiaguero haya sido convocado para ese equipo por encima de Leonel, designado el zurdo del Todos Estrellas, gracias a una excelente campaña, en la que culminó con balance de 12 y 5, y resultó el segundo serpentinero en promedio de carreras limpias, con 1.05, solo superado por el Meteoro de La Maya, Braudilio Vinent (0.85).
En cuanto a Aniceto, con el traje de Azucareros le propinó cero hits cero carreras a Pinar del Río, el 21 de enero de 1971.
Desde el surgimiento del equipo de Villa Clara, en la cita de 1977-1978, hasta la fecha recordamos a Robelio Carrillo, Dagoberto Martínez, Yasmani Hernández Romero y Misael Siverio, sin olvidar a Saydel Beltrán, con su paso fugaz por tres series nacionales.

Pero, en nuestra opinión, de esta generación anaranjada, el más sobresaliente fue el fallecido José Riveira Rodríguez (1958-2012), quien al vestir por última vez el traje villaclareño, con solo 30 años, tenía 81 salidas exitosas ante 47 fracasos, en 11 campañas, para un promedio de 633, el mejor entre todos sus comprovincianos (zurdos y derechos).
Novato del año en la contienda de 1977-78, Riveira, Vinent y el avileño Ediel Ponce La Rosa son los únicos tiradores que en su temporada de estreno lideraron el promedio de carreras limpias.
Cuando el equipo de Villa Clara se agenció el primero de sus cinco gallardetes en la pugna de 1982-83, Riveira encabezó el departamento de efectividad 0.63, así como el de ganados y perdidos (6 y 0), además de ser proclamado el zurdo del Todos Estrellas.
Nunca hizo el Cuba principal, aunque estuvo en preselecciones nacionales y varios topes internacionales; pero aquella fue una época en que coincidieron muchas estrellas del mal llamado brazo equivocado, como Jorge Luis Valdés, José Modesto Darcourt, Omar Ajete y Pablo Miguel Abreu, por solo mencionar a cuatro.
Dejé intencionalmente para el final al que considero el mejor zurdo no solo de este territorio, sino de todos los nativos del país: el santaclareño Miguel Ángel Mike Cuéllar Santana, quien cumpliría 88 años el próximo jueves 8 de mayo de no habernos abandonado físicamente el 2 de abril de 2010.
De Mike —a quien tuve el honor de entrevistar en la primera mitad de los años 90 del pasado siglo— basta señalar que en 15 temporadas en las Grandes Ligas ganó 185 juegos y perdió 130, tuvo cuatro campañas de 20 o más victorias, participó en 4 Juegos de las Estrellas; 3 Series Mundiales, en las que ganó el codiciado anillo con los Orioles de Baltimore, en 1970, y en 1969 compartió con Denny McLain, de los Tigres de Detroit, el premio Cy Young, único cubano en lograrlo y primero en ostentarlo entre los ocho latinoamericanos que lo han alcanzado. ¿Alguna duda?