
Muchas son las reacciones expuestas a la prensa desde que se dieran a conocer los ganadores del Balón de Oro 2025. Para unos, la mayoría, primó la sabiduría y la justicia. Para otros no hubo coherenia en el ranking final. Sin ánimos de parcialidades o sesgos fanáticos, la decisión está basada en aporte, entrega y títulos, diferenciales que Dembélé y Aitana Bonmatí poseen en gran cantidad de estadísticas.
París fue el escenario de dos coronaciones que, aunque distintas en estilo, compartieron el brillo de la excelencia. Ousmane Dembélé y Aitana Bonmatí son, hoy día, los mejores futbolistas del año, en una edición marcada por la consolidación de talentos emergentes.
El francés de 28 años conquistó su primer Balón de Oro tras una temporada deslumbrante con el Paris Saint-Germain, pues, acumuló 1380 puntos en la votación, superando con holgura al español Lamine Yamal, quien obtuvo 1059.
Campeón de Champions League, Liga y Copa de Francia, Dembélé fue el motor ofensivo de un PSG que, por fin, logró el ansiado triplete. Su versatilidad, regate endiablado y capacidad para desequilibrar en los momentos clave lo convirtieron en el favorito de 73 de los 100 periodistas votantes.
Esta victoria representa una reivindicación personal tras años marcados por lesiones y altibajos. El trofeo, recibido entre lágrimas y agradecimiento familiar, simboliza su madurez futbolística y emocional.
Al finalizar la gala Lamine Yamal y Dembélé protagonizaron uno de los gestos más mediáticos de la noche: el reconocimiento de una generación que se despide y otra que comienza. Yamal, con apenas 18 años, se llevó el Trofeo Kopa al mejor jugador joven, y ya se perfila como heredero natural del trono.
Por su parte, la reina absoluta del fútbol femenino mundial, Aitana Bonmatí consiguió su tercer Balón de Oro de forma consecutiva, en una gala que premió su excelencia futbolística. La centrocampista del FC Barcelona y de la selección española sumó 506 puntos, superando por 28 a Mariona Caldentey, su compatriota y rival en la votación.
Aitana fue clave en la conquista de la Champions League y la Eurocopa para las catalanas, mostrando un dominio técnico y táctico que la distingue como la mejor organizadora del juego en el mundo.
Su discurso tras recibir el premio —entregado por Andrés Iniesta— fue un homenaje a sus compañeras y a la lucha por la igualdad. «Es el primer año donde tenemos los mismos premios que el masculino. La igualdad es algo que hemos pedido».
Con un estilo sobrio, cerebral y elegante el eje del Barça y de la selección española femenina, vive una era dorada con cinco Balones de Oro consecutivos entre Aitana y Alexia Putellas.
Dembélé representa el triunfo de la resiliencia y el talento redimido, Aitana encarna la constancia, el liderazgo y la evolución del fútbol femenino. Ambos tomaron del tiempo el aprendizaje y la seguridad. La historia del deporte, y sus coronaciones en 2025 son reflejo de un año donde el fútbol, en todas sus formas, brilló con luz propia. Es por ello, que lejos de la cantidad de reacciones, la gala por el balón dorado está vez resultó un espectáculo de futuro.