A propósito del aniversario 70 de la Universidad Central «Marta Abreu » de las Villas (UCLV), el primer secretario del PCC en Villa Clara, Osnay Miguel Colina Rodríguez, y la rectora, Dra.C. Osana Molerio Pérez, se reunieron este martes 7 de junio con directivos empresariales de la provincia y del centro de alto estudios, para chequear las principales acciones y situaciones pendientes en el centro.
Se debatieron desde los temas de iluminación en distintas áreas hasta el reforzamiento de las opciones gastronómicas, pasando por la preocupante situación de las calderas del comedor universitario, ya no solo por la pérdida de energía y combustible, sino por la propia seguridad del personal.
Varios fueron los asuntos tratados con la empresa eléctrica. La rectora pidió a la UNE la posibilidad de conectar los tres edificios de frente al comedor al grupo electrógeno de la Universidad para iluminar los lobbys y el parque y así evitar posibles accidentes, además de prepararlos para posibles contingencias, como podría ser el paso de un huracán.
Se informó que la empresa eléctrica procederá al cambio del transformador que sostiene todas las conexiones de la Universidad, y que al no soportar la cantidad de energía, provoca la caída de los sistemas. También será movido del circuito 131 a uno más estable.
Se particularizó en la situación constructiva del edificio U3, inversión de la Universidad para este 2022, y sobre la sustitución del sistema de alimentación de corriente. Según los representantes de las entidades implicadas (Micons y UNE), deberá estar listo antes de fin de año.

El primer secretario indicó tratar de no apagar los dos circuitos de la Universidad al mismo tiempo, alternar uno y otro para que los estudiantes tengan movilidad y posibilidad de estudiar. Especial atención requirió el tema de la alimentación de los estudiantes. Ante la falta de recursos como la harina para el pan, Colina Rodríguez pidió creatividad y pensamiento constante.
«No podemos estancarnos en las necesidades que tenemos. Cuando discutamos un problema tenemos que ponernos en la piel de quien lo sufre. El caso de los estudiantes universitarios es lo mismo: pensar cómo es estudiar en una beca sin corriente, cómo es venir y regresar a Santa Clara con las limitaciones del transporte, qué opciones alimentarias tengo », explicó Colina.
Dos temas de histórica demanda salieron a colación: la piscina universitaria y el CEDER (centro deportivo). Ya el cloro está garantizado, falta la aprobación de Salud Pública y el especialista de la Cruz Roja. También se planteó la necesidad de tres lámparas LED para la seguridad en el área de baño.
«Si hiciéramos una encuesta entre los estudiantes para saber si preferirían una inversión en la beca o en el CEDER, estaría pareja la cosa. Por eso creo que en un año como este, de Congreso de la FEU, sería bueno que se pudiera arreglar este edificio », aclaró Molerio Pérez.
Como parte de la política de balance entre todas las áreas y sedes de la Universidad se trató la situación del techo del centro deportivo de la Facultud de Cultura Física (conocida como el Fajardo), una cuestión vital dado el perfil de esta sede. También se planteó la necesidad de rescatar, al menos, una de las piscinas.
En la sede pedagógica Félix Varela destacó el tema de las paradas para los trabajadores, pues no tienen dónde guarecerse del sol o de la lluvia, además de tener que esperar los transportes en la hierba. También se intercambió sobre el escenario de los asentamientos ilegales (llamados «Llega y pon) al lado del acceso principal, y los robos que han afectado el proceso docente educativo.
Otros asuntos tratados fueron las precisiones sobre la situación constructiva de las subsedes de Sagua la Grande, Caibarién y Placetas, el proceso de pintura de los edificios U2 y U4, retomar las obras de los baños del Teatro y hacer con CEDAI (Empresa de Automatización Integral) una caja para controlar todas las luces de este en un solo lugar. También se abordó la inversión de los filtros de agua para rehabilitar integralmente la potabilizadora de la Universidad y la situación con los pinos del «Fajardo » y los árboles de la UCLV en el contexto de temporada ciclónica.