«Nosotros también formamos parte del pueblo que sufre los apagones. Muchas veces nos enfrentamos a averías sin saber a qué hora llegaremos a nuestras casas, y, en ocasiones, al regresar al hogar tampoco tenemos corriente. Debemos unirnos y cada uno hacer lo que nos toca para echar para alante este país », declaró Michel García Alfonso, jefe de brigada de Mantenimiento y Construcción en Ranchuelo, quien estuvo entre los presentes en la reunión técnica trimestral de la Empresa Eléctrica en Villa Clara, desarrollada, en la mañana de este sábado, en el teatro del complejo recreativo Somos Jóvenes.
Armando Carrazana Benítez, jefe de unidad de Cifuentes, confesó que «es difícil porque la población no entiende el apagón. Nos toca explicar y dar nuestro máximo esfuerzo ».

En el encuentro, que contó con la presencia del gobernador de Villa Clara, Alberto López Díaz, se realizó una presentación sobre salud y seguridad en el trabajo, y después se debatió sobre cómo evitar accidentes mortales y la importancia de respetar las medidas de seguridad. Se estableció, además, un diálogo relacionado con las quejas de la población, estrategias para mejorar el servicio, dificultades para encontrar las direcciones de los reportes nocturnos (sobre todo, en las zonas rurales). Se mencionaron también las limitaciones con el tema de ropa y calzado, escaleras, medios de seguridad, guantes eléctricos, varas y otros implementos.
Carlos Alberto García Pérez, jefe de brigada de Energizado e instructor de la Escuela Provincial de Formación de Linieros del municipio de Santa Clara, instó a «eliminar la burocracia, si un cliente se acerca a nosotros podemos resolver el problema ahí mismo. No debería tener que tramitar la queja en el despacho. Porque, entonces, el carro se va del lugar, el cliente se molesta y, además, gastamos combustible doble ».
«Esta es una empresa de servicios y esa es nuestra prioridad. El trato a las personas, a la hora que sea, resulta vital para la satisfacción de nuestra población », aseveró el director general de la Empresa Eléctrica en Villa Clara, Eduardo Enrique Pérez Reyes.

La reunión sirvió también para repasar los conocimientos sobre los dispositivos y herramientas tecnológicas. En este punto se les dio especial importancia a los problemas que surgen a la hora de manipular los interruptores y las averías, debido, sobre todo, a la situación actual de los apagones. Ellos provocan, en ocasiones, un fenómeno conocido como carga fría: cuando se apaga un circuito por mucho tiempo, al reactivarse pueden ocurrir averías por el enfriamiento de las líneas eléctricas. Debido a ello surgen averías que extienden la duración de un apagón en un bloque.
El gobernador de Villa Clara, Alberto López Díaz, reconoció el trabajo de los electricistas en estos momentos difíciles:
«Si bien los trabajadores de la Salud y los científicos que trabajaron en la vacuna se convirtieron en héroes hace unos meses durante la pandemia, hoy son los trabajadores de la Unión Eléctrica los héroes anónimos de la nación.

«Han demostrado compromiso y voluntad, pues lo que menos se ha discutido hoy es lo que les falta. Podrían haberse pasado toda la mañana hablando de eso. Sin embargo, han debatido sobre la búsqueda de soluciones. Eso dice mucho de ustedes, más aún cuando cada día tienen la valentía, la sinceridad y la responsabilidad de dar la cara ante la compleja situación que vivimos », aseguró López Díaz.
Armando Hernández Pérez, despachador y jefe de turno de la Empresa Eléctrica Provincial, con una voluntad esperanzadora, confesó a Vanguardia: «Cuando las condiciones del sistema son las mejores, nosotros siempre estamos riendo, compartiendo, jaraneando. Llevamos mucho tiempo que cuesta trabajo sacar una sonrisa. Nuestra idea es que esta situación durará lo menos posible, porque sabemos que el país está en la búsqueda de soluciones. La función de nosotros es darle el servicio al cliente hasta el metrocontador, y si él no se encuentra satisfecho, tampoco nosotros no podemos estarlo. Por eso seguiremos trabajando con todo lo que esté a nuestro alcance por recuperar la sonrisa: la nuestra y la del pueblo », concluyó.