Temporada ciclónica activa, según los meteorólogos

Se pronostica una temporada activa, en la que podrían desarrollarse, al menos, 15 ciclones tropicales. En este momento no hay amenazas en nuestra área.

Compartir

Condiciones actuales en el Atlántico.
El Centro Nacional de Huracanes (NOAA), radicado en Miami ratifica que, hasta el momento no existe una perturbación o disturbio en el área. (Foto: Tomada de Internet)
Ricardo R. González
Ricardo R. González
@riciber91
246
02 Junio 2025

Desde el 1.o de junio y hasta el 30 de noviembre la cuenca del Atlántico, el golfo de México y el mar Caribe vivirá los episodios de lo que expertos vaticinan como «temporada ciclónica activa».

También es el criterio del máster Amaury Machado Montes de Oca, al frente del grupo de pronósticos del Centro Meteorológico Provincial (CMP), quien llama a «informarse y estar atentos».

Nombre de los ciclones tropicales para la temporada 2025.
Nombres de los eventos para la temporada del actual año. (Foto: Cortería del CMP)

Amaury subraya que este mundo de los pronósticos no es nada espontáneo ni al azar. «Desde muchos meses antes se analizan las condiciones atmosféricas que rigen para la temporada ciclónica, en la que intervienen varios factores; sin embargo, entre los de mayor peso figura el «combustible» del mar, con temperaturas muy elevadas que desde 2023 mantienen las anomalías crecientes, mes a mes, en el área tropical y en el Caribe y que contribuirán lo suficiente para generar el ciclón tropical».

No restan importancia las ondas tropicales, que continuarán saliendo de África o, quizás, en latitudes más bajas, y la formación o no de un evento el Niño o la Niña sobre las aguas del Pacifico Central, que pesan en más del 93 % de los predictores.

Machado Montes de Oca agrega la existencia de factores estacionales que no se pronostican, como ha ocurrido en años anteriores. Entre estos aparece la concentración del polvo del Sahara, que va a disminuir el efecto de la temporada ciclónica en junio, julio y principios de agosto, así como la oscilación Madden-Julian u onda intermitente que transita, de oeste a este, a través de todos los trópicos durante 30 a 60 días con una fase positiva y otra negativa. La primera activa la temporada.

Comportamiento del polvo del Sahara.ccc
El polvo del Sahara constituye otro de los factores imposibles de pronosticar, porque guarda relación con variables muy típicas del monzón africano y las grandes diferencias estacionales de temperatura y humedad entre el Sahara y el Océano Atlántico ecuatorial. (Foto: Tomada de Internet)

Respecto a la influencia del polvo del Sahara constituye otro de los factores imposibles de pronosticar, porque guarda relación con variables muy típicas del monzón africano y las grandes diferencias estacionales de temperatura y humedad entre el Sahara y el Océano Atlántico ecuatorial, sin conocerse la cantidad de toneladas que trae ni en qué fecha.

«Con todos estos elementos la probabilidad de afectación a Villa Clara está dada siempre después del 15 al 20 de agosto hasta septiembre y parte de octubre».

Cuestión de cifras

Los centros internacionales ofrecen una media entre 13 a 17 ciclones tropicales. Se pronostican unos 15 en la cuenca del Atlántico norte; ocho de los cuales pudieran alcanzar la categoría de huracanes.

Posible área de formación de los ciclones tropicales pronosticados para 2025.
Diez de los 15 ciclones tropicales que se pronostican deben desarrollarse en el área oceánica del Atlántico, tres en el mar Caribe, y dos en el golfo de México. (Foto: Tomada de Internet)

Diez de ellos deben desarrollarse en el área oceánica del Atlántico, tres en el mar Caribe, y dos en el golfo de México.

Las probabilidades de que se origine e intensifique, al menos, un huracán en el Caribe es de un 75% de acuerdo con estimados, mientras que la penetración de uno de procedencia atlántica en el Caribe resulta moderada.

Villa Clara en el ojo de los huracanes

 La experiencia del máster Amaury Machado y los estudios realizados por el CMP afirman que en junio, mes inicial de la temporada, la zona cubana más afectada recae en la occidental.

En este mes se forman en el mar Caribe occidental, y Villa Clara no registra afectaciones desde 1906 por cuenta de una tormenta tropical, mientras las estadísticas de julio muestran solo uno, en 2005, con «Dennis», y en el caso de agosto influyen más sobre el occidente cubano, y después la región central.

Agosto registra hasta dos afectaciones en un mismo mes, pero hace más de 100 años que no ocurre, y en los últimos años han existido situaciones muy débiles o ninguna.

Septiembre trae un panorama diferente debido a que en los últimos 25 años ha sido el período más fuerte para la provincia. Casi la totalidad de los sistemas tropicales se registran en ese mes. Octubre deja en el recuerdo el impacto de «Michelle en 2001, sin otras afectaciones directas, y noviembre también acumula pocas incidencias, el «Kate» fue el más famoso en 1985, en tanto 2020 dejó las lluvias intensas de «ETA» al afectar a Pinar del Río.

Para Machado Montes de Oca las probabilidades de afectación de la región occidental duplican las posibilidades sobre la región central y las triplican en el caso del oriente.

«La mayor peligrosidad —insiste— se concentra desde mediados de agosto hasta octubre».

Especulaciones y otras consideraciones

El jefe del grupo de pronósticos del CMP también alude a que ya los «meteorólogos empíricos» comienzan a hablar de una formación ciclónica que afectará en los próximos días. «Falta mucho para eso, y que vaya a afectar a Villa Clara, menos; simplemente mantener la vigilancia y seguir los medios oficiales».

Otro aspecto a considerar es que en 2025 no va a regir ni El Niño ni la Niña. Será neutral, y al no existir ni un calentamiento ni un enfriamiento, la atmósfera permanecería en normalidad, por lo que existirán condiciones favorables para el desarrollo de ciclones tropicales y, por consiguiente, su intensificación.

«El año pasado existía La Nina, he aquí la diferencia; que no exista en 2025 podría al aumentar las formaciones de estos episodios durante julio, agosto y septiembre, lo que nos lleva a prestar atención y a estar informados».

Algo más sobre la formación de ciclones tropicales

— El choque de la humedad con el aire caliente provoca la fuerza necesaria para que una depresión tropical gane fuerza y se convierta en huracán.

— Se estima que la temperatura del mar debe superar los 26 o C.

— Las ondas tropicales en el océano Atlántico que se originan en la costa africana tienen las condiciones óptimas para la formación de estos fenómenos.

— El huracán nace de una depresión tropical. Al superar los 120 Km/h adquiere formalmente esta clasificación.

— La evolución de un ciclón tropical puede desarrollar cuatro etapas: perturbación tropical, depresión tropical, tormenta tropical y huracán.

— Los nombres de los ciclones siguen un orden determinado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Desde 1979 se alternan denominaciones masculinas con femeninas, y se utilizan seis listas en rotación.

Comentar