Ianisbel y Daniela viven con nuevos riñones

El gesto de familias donantes y los protocolos establecidos en el Programa de Trasplante posibilitaron la realización de los dos primeros injertos renales que reporta Villa Clara en este año 2025.

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«A esos familiares de los donantes mi gratitud es eterna, y su ser querido sigue viviendo en mi», declara Ianisbel García Martínez (a la izquierda). «Ahora todo dependerá de mi disciplina y comportamientos en la vida», significa la santaclareña Daniela de la Caridad Ruiz Alejo. (Fotos: Ricardo R. González)
Ricardo R. González
Ricardo R. González
@riciber91
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22 Octubre 2025

Octubre trajo la posibilidad de que Ianisbel García Martínez y Daniela de la Caridad Ruiz Alejo sientan la vida de una manera diferente al recibir sus nuevos riñones gracias a la decisión de familias de los donantes y al protocolo existente en el Programa de Trasplantes.

De esta forma el hospital universitario clínico quirúrgico Arnaldo Milián Castro, de Villa Clara, realizó ambos procederes en días pasados, que  resultan los dos primeros de este tipo en 2025.

Ianisbel, una espirituana de 31 años, y Daniela de la Caridad, santaclareña que suma 28, estuvieron sometidas a métodos dialíticos durante varios años y ahora repasan sus historias de humanismo y amor.

Desde el Yayabo a Santa Clara

Según relata Ianisbel una infección en la garganta padecida cuando era niña incidió en sus órganos renales. Las sepsis eran marcadas y alternaban entre una y otra. Poco a poco apareció una enfermedad de base que indujo al seguimiento.

Ianisbel García, paciente espirituana sometida a trasplante renal en Villa Clara.
Junto a Ianisbel y su mamá Estrella aparecen los doctores Yuniel González Cárdenas, Rafael E. Cruz Abascal y Claudia Cárdenas Turiño, residente de tercer año de Nefrología Clínica. (Foto: Ricardo R. González)

«Todo se complicó en la etapa de la pandemia. Hice una pos-COVID, y ya el riñón no soportó más. Casi cinco años de hemodiálisis con tres frecuencias semanales. Gracias a todos los médicos, a Dios y a esa familia que ofreció su consentimiento para donar el órgano que me ha dado una nueva oportunidad. En medio de su dolor no tengo palabras para agradecerles tanto».  

—¿Cómo valoras al personal del servicio?

—La atención es lo máximo. Siempre han estado pendientes de nosotras, no nos han dejado ni un momento. Ese es otro de los detalles admirables.

—¿Ya los consideras familias?

—Ah, ellos saben que sí.

—¿Tu futuro?

—Comienza una nueva era. Poder criar a mi niña Alicia, de siete años, y sé que a partir de este momento tengo que ser más disciplinada.

Su mamá, Estrella Martínez Guevara, observa a su hija y suscribe el «superagradecimiento, tanto al colectivo de trabajadores en general como a los familiares del donante. Si ellos no ofrecen su aprobación para poder realizar el trasplante nunca hubiera llegado a su realización. Cuando me vaya de este mundo, desde donde esté, continuará mi eterna gratitud».

Daniela desde otra óptica

Aún le parece irreal estar sobre una cama del Servicio de Trasplante del Hospital de Villa Clara. Ya quisiera irse a su casa del reparto santaclareño Virginia, y minimizar los recuerdos de aquellas diálisis peritoneales, otro de los métodos purificadores de los riñones cuando estos no pueden  filtrar la sangre de la mejor manera.

Daniela de la Caridad Ruiz Alejo, paciente sometida a trasplante de riñón en Villa Clara.
También Mirelys y su hija Daniela tienen las mejores apreciaciones del equipo médico y paramédico y las familias. (Foto: Ricardo R. González)

Daniela de la Caridad Ruiz Alejo describe que estuvo 11 meses con el proyecto del Dr. Henry en la sala 20 sometida a tratamiento, «y un día terminando una de las sesiones me informaron que debía presentarme aquí para la realización del trasplante».

—¿Qué tiempo medió para llegar al hospital?

—Apenas una hora.

—¿A partir de ahora?

—Seguir las instrucciones y estar con una férrea disciplina.

Muy atenta, también, a las palabras de su hija está Mirelys Alejo García. Madre, al fin, no deja de mostrar las virtudes de un ser humano agradecido ante esta segunda oportunidad de vida para Daniela.

«Todo mi aliento hacia el colectivo de trasplante y al de diálisis peritoneal, y no puedo minimizar la decisión de esa familia que donó el órgano de su ser querido. Como madre me toca el corazón y es poco decir gracias porque el gesto es incalculable».

Las pupilas del doctor Yuniel

El coordinador regional del Grupo de Donación y Trasplante, doctor Yuniel González Cárdenas, es voz autorizada para emitir consideraciones.

«Los dos primeros injertos realizados en este año tienen evolución satisfactoria. Ianisbel, ya con 16 días de trasplantada, está a punto de recibir su egreso, quizás en horas. Mantiene un descenso importante de la creatinina (indicador para determinar cómo funcionan los riñones) que la acerca a valores normales, en tanto el resto de los parámetros resultan muy favorables».

Equipo multidisciplinario 

— Dr. Yuniel González Cárdenas. Nefrólogo, coordinador regional de Donación y Trasplante.
— Dra. Liz Marlin Rodríguez García, coordinadora de Donación y Trasplante del hospital Arnaldo Milián Casto.
Cirujanos: Raunel Batista y Emilio José Nieto
Anestesiólogos: Dra. Yamilia Pérez Hernández y Lic.  Marisol Martínez Contreras
—Nefrólogos: Doctores Rafael E. Cruz Abascal, Yandy Noel Martínez Cuéllar, Lisbet Pérez Delgado y Yamisel Ortega Rosendiz.
Enfermeros: Licenciados Yoel Rodríguez Sarmiento, Freddy Hernández Ramírez, Yaneisy Martín Garcés, Dianaisa Aguilar, Adrián Trujillo, y las técnicas Gleisy Bermúdez y Yodanis Ramírez
Laboratorio: Lic. Yerenny Consuegra
Agradecimientos: Dirección General de Salud Villa Clara y al hospital universitario Arnaldo Milián Castro por su apoyo y entrega.

González Cárdenas considera que Daniela también marcha bien. «Aún está en fase de recuperación de las funciones del injerto y bajo tratamiento inmunológico para determinar su evolución.

Para el especialista de II grado en Nefrología hay que admirar los gestos altruistas de esas familias que donan los órganos de sus seres queridos cuando las posibilidades de vida son imposibles a causa de la muerte encefálica.

—Sin donación no hay trasplantes.

—Un precepto real. La decisión de las familias es sumamente agradecida luego de un consentimiento informado, donde no existen presiones y sí voluntad, y una vez que lo aprueban comienza una carrera vertiginosa para iniciar las acciones y comprobar la compatibilidad. Es el arduo trabajo de equipos responsabilizados con la extracción del órgano del donante y su injerto en el receptor»    

Radica en Villa Clara, mas el de trasplante constituye un servicio territorial extendido a las provincias de Cienfuegos, Sancti Spíritus y a otros municipios que realizan las hemodiálisis.

«En la actualidad la lista de espera en la región central totalizan 86 pacientes que aguardan por las contribuciones de las familias de donantes de órganos», precisa el doctor Yuniel González.

El nefrólogo, que sigue queriendo y abraza su especialidad, la considera una de las que más prepara para la vida debido a que el paciente renal crónico desarrolla múltiples enfermedades concomitantes.

«Exige profundizar en el tema, tener vínculos con otras ramas clínicas, prever las complicaciones, pero trabajas mucho, no solo con el enfermo, ya que se suma el medio social, la familia, los métodos depuradores, y cuando te dedicas al trasplante, tienes que lograr que ese paciente se inserte a la vida luego de haber perdido muchas funciones. Por ello, dentro de la Nefrología, es mi parte preferida al constatar sus resultados. Esa que no cambio por nada. 

Historia y actualidad del trasplante renal 

—La historia de los trasplantes renales es diversa, aunque se sitúa al año 1905 como referente del primero realizado en humanos del que se tiene noticias. A través del tiempo aparecen otras incursiones, incluso en diciembre de 1954, Joseph Murray superó la barrera del rechazo al utilizar un gemelo idéntico del paciente como donante.

—Cuba inicia los procederes en febrero de 1970, en tanto Villa Clara registra los dos primeros casos a fines de julio de 1986 en el único hospital clínico quirúrgico existente por entonces, en la calle Cuba.

—En dato conservador el costo de un trasplante de riñón oscila en el mundo entre los 40 000 y 70 000 dólares. Depende del país y del rango de la institución que lo realiza.

—Entre los síntomas de la insuficiencia renal crónica aparecen manifestaciones gastrointestinales (náuseas, falta de apetito, vómitos). También sed intensa, piel seca, prurito, palidez y anemia, entre otros.

—Las compatibilidades más significativas entre donante y receptor recaen, fundamentalmente, en el grupo sanguíneo, las pruebas inmunológicas de sensibilización y el mapa genético del paciente. Estas investigaciones consideradas del Primer Mundo garantizan la sobrevivencia a largo plazo.

—Entre las causas que provocan una insuficiencia renal crónica figuran la diabetes mellitus y la presión arterial alta. Resultan las más comunes que inducen a un trasplante renal, entre otros factores.

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