
Aunque la Ley Helms-Burton pretende la asfixia económica y apuesta por atemorizar y desestimular a la comunidad inversionista, varios empresarios con sólidos negocios en Cuba expresaron este viernes su voluntad de seguir avanzando en los proyectos actuales y futuros por la seguridad jurídica que les ofrece el país.
Rodrigo Malmierca Díaz, titular de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (Mincex), reiteró a representantes de 136 empresas y 20 embajadas la decidida posición del gobierno cubano de aplicar las garantías establecidas para proteger las inversiones extranjeras ante supuestas reclamaciones estadounidenses, en virtud de la activación del Título III de la Ley Helms-Burton.
Aseguró que ese engendro legislativo, por su carácter extraterritorial, no tiene jurisdicción en Cuba ni resulta aplicable en modo alguno.
Mientras Déborah Rivas Saavedra, directora general de Inversión Extranjera del Mincex, precisó las garantías que ofrece la legislación cubana a los inversores, sustentadas en la Constitución, la Ley No. 118 de 2014, Ley de Inversión Extranjera, y la Ley No. 80 de 1996, Ley de Reafirmación de la Dignidad y Soberanía Cubanas.

«El Estado promueve y brinda garantías a la inversión extranjera, como elemento importante para el desarrollo económico del país, sobre la base de la protección y el uso racional de los recursos humanos y naturales, así como del respeto a la soberanía e independencia nacionales ». De igual forma, el artículo 5 de la Ley No.118 explicita que «las inversiones extranjeras son protegidas en el país contra reclamaciones de terceros que se ajusten a derecho o la aplicación extraterritorial de leyes de otros Estados, conforme a las leyes cubanas y a lo que dispongan los tribunales cubanos ». (Yudy Castro Morales)