SANTIAGO DE CUBA.– Ofrendas florales a nombre del Primer Secretario del Comité Central del Partido, General de Ejército Raúl Castro Ruz; del Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, de los Consejos de Estado y de Ministros, y del pueblo de Cuba, fueron depositadas en el Día de los Mártires de la Revolución ante el retablo donde reposan los caídos el 26 de julio de 1953 y en la lucha insurgente.
En el propio cementerio patrimonial Santa Ifigenia, también fueron dedicadas ofrendas florales a nombre del pueblo de Cuba al inolvidable luchador clandestino Frank País García, al comandante René Ramos Latour (Daniel), y a los Hermanos Díaz, ante los panteones que acogen sus restos, así como al resto de los revolucionarios cuyas tumbas marcan banderas cubanas y del 26 de Julio.
La fecha fue escogida para tal reverencia en el propio año del triunfo, 1959, y en su primera conmemoración, el 30 de julio de ese mismo calendario, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz destacó a Frank y Daniel, ambos caídos heroicamente este día, pero de 1957 y 1958, respectivamente, como «símbolo de toda la generación que se sacrificó ».
Cada año vuelven entonces los santiagueros a rendir tributo, un homenaje que comienza desde temprano, en Callejón del Muro, el histórico sitio ensombrecido por la masacre que segó cobardemente la vida del insigne luchador revolucionario Frank País, y muy cerca de él la de su compañero de lucha Raúl Pujol a manos de esbirros de la tiranía batistiana.
Esta vez, junto a las tarjas que fijan los puntos exactos donde cayeran sus cuerpos ametrallados vilmente, junto a las banderas cubanas y del Movimiento 26 de Julio que las escoltan, se unieron las ofrendas florales que a nombre del pueblo de Cuba colocaran integrantes de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana y estudiantes.
Condenado enérgicamente por los santiagueros y en toda la nación, el sangriento crimen de aquella tarde fue escenificado hoy por artistas del grupo Calibán Teatro y el Guiñol de Santiago de Cuba, mientras el trovador Eduardo Sosa dedicó a los héroes la canción Pequeña serenata diurna, de Silvio Rodríguez.
A las ceremonias, encabezadas por la miembro del Comité Central del Partido, vicepresidenta del Consejo de Estado y presidenta del gobierno en la provincia, Beatriz Johnson Urrutia, así como por autoridades del Partido en el territorio, se sumó el acto efectuado en la Placita de los Mártires, para recordar en la ofrenda floral expuesta al pie de su obelisco la asidua presencia de jóvenes revolucionarios al lugar.
Asimismo, haciendo valederas las palabras del General de Ejército Raúl Castro Ruz, de que Frank era de esos hombres «que penetran hondo y definitivamente en el corazón del pueblo », como en la manifestación popular que acompañó su entierro y el del fiel compañero Raúl Pujol, nuevamente flores y banderas acompañaron el paso de la marcha que este martes recordó el hecho.



