
Estudiantes, trabajadores, combatientes y familiares de los internacionalistas caídos en el cumplimiento de su deber, de conjunto con el pueblo santaclareño, honraron este 7 de diciembre al Mayor General Antonio Maceo y su ayudante, el capitán Panchito Gómez Toro.
La jornada de recordación a los mártires presidida por Julio Lima Corzo y Alberto López Díaz, primer secretario del PCC y presidente del Gobierno en Villa Clara, respectivamente, y sus homólogos de Santa Clara, Osnay Miguel Colina y Yaritza Moya Caballero comenzó en el obelisco de La Rotonda, donde fue depositada una ofrenda floral ante el busto del Titán de Bronce, a 122 años de su caída en combate.

En la ceremonia Elizabeth Santiago Díaz, presidenta provincial de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media (FEEM), expresó que los pinos nuevos, orgullosos de sus raíces, confían en el futuro como dignos relevos de los héroes a quienes se les rinde honores, y tienen el compromiso de defender la Patria erigida con la sangre y sacrificio de muchos cubanos.
También, en la calle Independencia, en el lugar dedicado a la memoria de José Ramón Leocadio Bonachea, quien ofrendó su vida por la libertad de Cuba, se congregaron representantes de organizaciones políticas y de masas, quienes escoltados por un cordón de educandos de las diferentes enseñanzas, partieron en peregrinación hasta la necrópolis municipal, para rendir honores a los caídos en misiones internacionalistas, a 29 años de la Operación Tributo y en saludo al aniversario 25 de la fundación de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana.
Durante la peregrinación, al compás de la Banda Provincial de Conciertos, se dejaron escuchar las notas del Himno Invasor y otras marchas patrióticas, así como 21 salvas que colmaron de emociones la jornada matinal de este 7 de diciembre.

En la tribuna levantada frente al cementerio de Santa Clara, retornaron las canciones y poemas para no olvidar a los caídos por causas justas. Familiares y amigos regresaron como cada año, para decir hasta siempre a quienes ofrecieron su sangre generosa a otros pueblos hermanos.
También, Alexis Pérez Batista, primer secretario de la UJC en Santa Clara, evocó a Antonio Maceo y a su inseparable compañero Panchito Gómez Toro, y dijo que los caídos en ífrica multiplicaron las gloriosas acciones internacionalistas protagonizadas ahora por los médicos cubanos, dignos herederos de las tradiciones revolucionarias, y trasmitió a nombre del pueblo villaclareño y los jóvenes, la voluntad de continuar el legado dejado por los héroes.
En el panteón de los caídos por la defensa, nuevamente retornaron las lágrimas y los recuerdos de los valerosos jóvenes, que de manera desinteresada y con un alto altruismo, ofrendaron su existencia por un futuro mejor.
Ceremonias similares trascendieron en todos los municipios villaclareños, donde el pueblo recordó aquel 7 de diciembre de 1989, cuando en toda Cuba se pusieron en marcha los cortejos fúnebres como parte de la Operación Tributo.