Junio, en la misma mitad del año, llega investido de varias celebraciones importantes entre ellas el natalicio de Ernesto Guevara, ocurrido el 14 de junio de 1928, fecha convertida en fiesta y homenaje en Villa Clara, como en toda Cuba.
Hijo adoptivo de una ciudad que no olvida los intensos días de finales de diciembre de 1958, cuando llegó la libertad de manos del Ejército Rebelde, comandado por el médico argentino –cubano, quien dejó su presencia intangible por la calles de una urbe que cumple, en julio próximo, 330 años.
El cardiocentro de la provincia, prestigiosa institución de salud, la escuela vocacional de Ciencias Exactas, círculos infantiles, planteles estudiantiles y establecimientos productivos llevan el nombre del héroe.
Importantes centros fabriles como la planta mecánica Fabric Aguilar Noriega, la Industria Nacional Productora de Utensilios Domésticos Primero de Mayo, de Santa y la elaboradora de bujías Neftalí Martínez, de Sagua la Grande, guardan con amor recuerdos de sus inauguraciones por el entonces Ministro de Industrias.
El hálito del médico guerrillero aún habita en la Universidad Central Marta Abreu de Las Villas (UCLV), vestida de negro, mulato, obrero y campesino, como pidió en aquel diciembre de 1959, cuando recibió el título de Doctor Honoris Causa, a un año del triunfo de las huestes que comandaba contra las fuerzas de la tiranía.
La regularidad de circular a diario ante una bella escultura de Guevara, junto a la sede del Partido Comunista de Cuba en Villa Clara, así como también cerca del conjunto escultórico que recuerda la acción del Ejército Rebelde contra el tren blindado, en la batalla de Santa Clara, hacen más cotidiana su imagen.
Sobresale el complejo escultórico Ernesto Guevara, que guarda sus restos, visitado por miles de cubanos y foráneos cada año.
Otras obras de arte y sitios históricos evocan también al Guerrillero Heroico en la provincia, principalmente en la ciudad que lo acogió como un hijo; por eso su cumpleaños cada 14 de junio se convierte en un festejo de todos, ambiente para el homenaje y para ratificar la vigencia de su ejemplo, ideas y lucha. (Luz María Martínez Zelada)