
La reparación del puente elevado de la Carretera Central en Santo Domingo, Villa Clara, el mayor en trazado de curva de la región central, está a punto de terminarse luego de dos meses de labores ingenieras en los taludes terminales de la parte este del vial.
Después del azote huracán Irma, en septiembre pasado, el Grupo Nacional de Transporte, a partir de un dictamen técnico, orientó el cierre del paso de vehículos por el kilómetro 263, enclave del importante elevado. Entonces eran visibles las averías o fallas con deslizamientos de tierra, propensas a accidentes del tránsito y derrumbes.
![]() |
![]() |
![]() |
El 11 de enero, con la conclusión de los proyectos ingenieros, trabajadores de la brigada número de movimiento de tierra del Contingente Leoncio Vidal de la Ecoing 25, de Villa Clara, asumieron la rehabilitación del importante puente ubicado en la principal carretera cubana, una de las siete maravillas de la ingeniería civil nacional.
De manera escalonada eliminaron la capa vegetal existente y movieron el material de tierra indeseable en los taludes del puente elevado, uno de los 486 de hormigón armado que originalmente tuvo la carretera cuando en 1931 se concluyó.
Con el propósito de no afectar la circulación este-oeste, se terminó y asfaltó un desvío por la calle Fructuoso Rodríguez (Sur), de unos tres kilómetros.
José Cárdenas Fernández, jefe técnico de la obra, dijo a Vanguardia que los taludes, masa de tierra con pendiente y cambios de altura, se asentaron con respecto a la carretera en unos 200 metros de longitud.
La falla era apreciable, principalmente en el área izquierda, lo que obligó a una reparación capital del área y del puente, tránsito que en breve retomará su valor de uso.
Desde la cantera El Rojo, en las cercanías de Amaro, a unos 22 kilómetros, trasladaron unos 7500 metros cúbicos de rocoso para lograr la densidad requerida en los taludes de ambos lados de la vía.
Aquí, dijo, restan unos 10 días de trabajo y se ejecutan montos superiores a unos 482 000 pesos, cifra que llegará a unos 2 millones al adicionarse la inversión del desvío y un terraplén hasta la cantera El Valiente, cercano al poblado de 26 de Julio, precisó Alfredo García Villalobos, vicepresidente que atiende Construcciones en la Asamblea del Poder Popular en Santo Domingo.
Las condiciones técnicas del puente mejoraron con la inyección de hormigón debajo de la placa de rodamiento, y el rocoso y la tierra vegetal lograron la compactación demandada por los especialistas en áreas de los taludes hacia el este. En ese lugar colocarán barandas metálicas para garantizar la protección de vehículos durante la doble circulación de descenso y subida, señaló García Villalobos.
También precisó que el desvío del vial, con cinco obras fábricas por la zona de La Arboleda, solucionó unos 24 planteamientos de la población antes incomunicada en sus recorridos a la parte urbana de Santo Domingo.