
Durante 57 años los círculos infantiles han favorecido la integración plena de la mujer a la sociedad y desempeñado un importante papel en la formación de los niños y niñas cubanos. Como instituciones educativas constituyen la mejor opción para formar a nuestros hijos, sin embargo las capacidades están por debajo de las necesidades.
Es sorprendente el conocimiento que adquieren los pequeños en los círculos infantiles (CI). Y en esta inigualable tarea, las educadoras desempeñan un importante papel al dotarlos de conocimientos en las diferentes áreas de desarrollo que están encaminadas a formar en los niños hábitos, habilidades y sentimientos.
Hacemos mención a la lengua materna donde los infantes desarrollan su vocabulario, se expresan primeramente con gestos, mímicas, frases y luego con oraciones completas utilizando todas las formas gramaticales del idioma al culminar su 6. º año de vida. En la Educación Física adquieren habilidades motrices, en la Educación Musical desarrollan su oído musical y aprenden a entonar canciones, a desarrollar movimientos corporales al escuchar las diferentes canciones infantiles y llegan hasta expresarse en las diferentes manifestaciones artísticas.
En la Educación Plástica aprenden desde las primeras edades a realizar garabatos, trazos y dibujos y estas actividades las constituyen las premisas para desarrollar su control muscular; es decir, la motricidad fina que posteriormente le facilitará la escritura cuando termine en el 6. º año de vida.

Sin embargo, el acceso a los CI se hace cada vez más complejo porque la demanda siempre es mayor que las ofertas de capacidades. Aunque existe la Resolución No.6/2017 donde se estipulan prioridades para el otorgamiento a las madres trabajadoras con dos hijos o más, lo cierto es que este proceder presenta limitaciones pues siempre no existen las capacidades disponibles para beneficiar al 100% de las madres que solicitan estos servicios. En tanto estas se conceden según la disponibilidad de plazas en los distintos años.
A nivel de país, en la política demográfica están aprobadas medidas para enfrentar los elevados niveles de envejecimiento poblacional. Una de ellas es priorizar la asignación de círculos infantiles a partir del segundo año de vida a las madres trabajadoras que procreen su segundo hijo o más, así como la asignación de seminternados.
Historias reales
Yadira Machado Machado trabaja como auxiliar general de limpieza en la Ciudad Escolar Comandante Ernesto Che Guevara, y es madre de cuatro niños. La mayor, Yenevith Ramos Machado, cursa el 5. º grado en un seminternado. Los jimaguas Yoeni y Yoani, ya están matriculados en el segundo año de vida del CI Pequeños constructores. Pero le falta que le otorguen una capacidad para la pequeña Yenisbel, quien cumplirá tres años el venidero 29 de diciembre.
«Por ahora la cuida mi suegra, y, por suerte, no he tenido que recurrir a las cuidadoras particulares. Vivimos en la Base Aérea y por la lejanía de mi trabajo, muchas veces tengo que salir antes del horario establecido. Mis superiores me consideran bastante y entienden que a veces tengo que faltar cuando alguno se me enferma », explica.
Otra de las madres necesitadas de CI es Lizandra Fernández Pedroso. Labora como operadora laminal en la Biofábrica de la Base Aérea. Tiene dos hijas: Analía, de cuatro años, y Analiet Espinosa Fernández, de dos.
«A la más pequeña dice ya le otorgaron plaza, pero me falta la otra. He tenido que pagar 250 pesos para que me las cuiden y poder trabajar. Pero, si mi salario es de 315 pesos mensuales y el de mi esposo de 290, ¿cuánto nos queda para vivir? »
Similar situación experimenta Zuliany Hernández Olivera, trabajadora comercial en la sucursal 4302 del Banco Popular de Ahorro. Desde marzo de 2017 hizo la solicitud del círculo para el menor de sus hijos, pues la mayor, Melany Rodríguez Hernández, cursa el 5. º grado en un seminternado.
«Para poder laborar y que me cuiden al niño tengo que pagar 10 CUC. Además de llevar la alimentación y recursos de aseo personal. Lo cuidan de 8:00 a.m. a 5:00 p.m., y mi horario es hasta las 7:00 p.m., por lo que muchas veces alguien de la casa tiene que ir a recogerlo. Necesito mucho el círculo y hasta el momento la respuesta que me han dado es que debo esperar el otorgamiento masivo en junio próximo », explica.
Las cifras hablan
En Villa Clara existen 62 CI. Según nos comentó Carmen Amador Curbelo, jefa del Departamento de Primera Infancia, en la Dirección Provincial de Educación el proceso de otorgamiento marcha con regular normalidad.
«Estamos al día con los nacidos en 2017, que deben matricular en segundo año de vida. Sin embargo, no ocurre igual en el resto de los años; es decir, 4. º, 5. º y 6. º años de vida porque el otorgamiento depende de la disponibilidad de plazas, que en estos momentos no tenemos ».
Durante el mes de octubre se beneficiaron 1260 madres trabajadoras incorporadas a diferentes sectores de la sociedad. De acuerdo con Amador Curbelo esta cifra puede aumentar antes de que finalice el año. Las madres con dos hijos o más se analizan mensualmente en las comisiones de otorgamiento municipales y siempre que exista la capacidad se benefician según lo establece la Resolución Ministerial.

Desde junio hasta la fecha se han beneficiado 288 madres de ellas 265 con dos hijos y 23 con tres todas en el 2. º año de vida. En el resto de los años no hay capacidades para ofertar.
Otra problemática muy seria a enfrentar es la situación de la cobertura docente en estas instituciones. Sobre todo en la ciudad de Santa Clara, donde existe una necesidad de 109 docentes, lo cual se cubre con alternativas para no afectar la calidad del proceso educativo. En el resto de los municipios no se presentan dificultades en este sentido.
Asimismo, se realizan cursos emergentes de preparación del personal requerido para este tipo de centros educativos. Mientras tanto, se forman más de 260 futuras educadoras de círculos infantiles en la Escuela Pedagógica Manuel Ascunce Domenech y en la Universidad Central «Marta Abreu » de Las Villas (UCLV).
Proyecciones
Durante el presente curso escolar, según refirió el doctor Liem O'Farrill Mons, director de Educación en Villa Clara, resultó significativa la gestión y apoyo de directivos de la Asamblea Provincial del Poder Popular y el trabajo de la dirección del Comité del Partido en la provincia para la reapertura de los distintos CI que necesitaron reparación y mantenimiento.
«Nos referimos a cuatro instalaciones. Ellas son Pequeños combatientes, Seguidores del Che, Soldadito valiente y Barquito de papel. Esta última se prevé que inicie sus funciones en el mes de diciembre en homenaje al 60 aniversario de la Batalla de Santa Clara y el triunfo de la Revolución ».
De acuerdo con O'Farrill Mons, la reapertura de estos CI posibilitó ofertar nuevos cupos para las madres trabajadoras. De igual manera, fueron abiertos uno en Cifuentes y otro en Caibarién, municipios donde existía una sola institución de este tipo. Amanecer feliz, en el primero, y El Camarón encantado, en el segundo. Solo queda pendiente la apertura del CI Mario Domínguez, en Sagua la Grande, cuya conclusión está incluida en el plan de mantenimiento y reparación para el 2019.
También, siguiendo las orientaciones del Ministerio de Educación, en el territorio se cumple con la política de que los organismos que tengan las condiciones pertinentes puedan crear Casitas de la Infancia. Hoy existen cuatro. Estas se ubican en la Universidad de Ciencias Médicas Serafín Ruiz de Zárate Ruiz, la UCLV, la Empresa Valle del Yabú y la textilera Desembarco del Granma. Pero en estos momentos en cada municipio se realiza un estudio de los posibles locales que pueden destinarse a estos fines.
A la altura de los nuevos tiempos, los círculos infantiles ejercitan y fortalecen al máximo las habilidades de los niños y niñas hasta alcanzar su formación integral, mientras resulta el espacio para comenzar a inculcarles los hábitos cívicos y valores morales que los acompañarán a lo largo de su vida.
De simples centros para cuidado doméstico en los primeros años de su fundación, los CI devinieron centros educativos dotados de claustros y programas que favorecen, entre otros, el desarrollo de la motricidad, el lenguaje, la relación del niño con el entorno, el mundo de los objetos, los hábitos de educación formal, y el vínculo con las familias.

Su importancia la señaló el propio Comandante en Jefe Fidel Castro, por ser allí «donde el niño adquiere los primeros hábitos de la vida social, aprende a actuar con los demás, a colaborar con los demás, a respetar a los demás, recibir la educación, la disciplina, conocimientos artísticos, conocimientos de la vida, culturales, alimenticios… »
Pensemos, ejecutemos y esforcémonos para que se conviertan en realidad las estrategias trazadas en aras de un beneficio que es derecho y necesidad de las madres trabajadoras.