Los vegueros villaclareños asumen un compromiso no registrado antes en el cultivo del tabaco, al programar rendimientos superiores a una tonelada/hectárea de hoja, en tercios o torcida, como reclaman el prestigio y el mercado crecientes de un renglón destinado en lo esencial a la exportación.
La provincia de Villa Clara, con más de un lustro sin satisfacer las producciones agrícolas, plantará a partir del actual mes unas 2026,11 hectáreas de la solanácea en territorios de Manicaragua con el 49,3 % del volumen total, así como en Camajuaní, Placetas y Santa Clara, los cosecheros principales.
Durante este mes se plantarán unas 80 hectáreas, y aunque noviembre constituye el mes óptimo, las mayores superficies para el fomento de las plantaciones quedarán para diciembre, período tope de siembra.
De acuerdo con directivos se dispone de posturas suficientes en los diferentes municipios con el propósito de desplegar los esquemas trazados por la Empresa de Acopio y Beneficio del Tabaco (ABT) La Estrella, en la provincia.
La inclusión de simientes de mayor potencial productivo, y la garantía de un 91% de los suelos con riego de agua y el cumplimiento del calendario de siembra al concluir diciembre, así como de construcción y mantenimiento de las casas de curación, figuran entre los factores objetivos que estimulan al reto de los acopios de unas 2061 toneladas concertadas.
Al fijar los rendimientos en 1t/ha en la campaña de 2016 se obtuvo 0.83, el mayor registro, los cosecheros precisan de disciplina tecnológica para desterrar factores subjetivos que, unidos a otros objetivos, incidieron de manera negativa en temporadas precedentes.
Durante la contienda, en la cual intervendrán más de 1600 vegueros, se edificarán más de 240 aposentos y cerca de medio centenar recibirá reparaciones. También existe un programa escalonado para el acondicionamiento de suelos, según las estrategias establecidas en el período de plantación.
El pasado año se contrataron en la provincia unas 2602 hectáreas, cifra mayor que la actual, pero se satisfizo fuera de calendario. El pronóstico de producción ascendió a 2658 toneladas de tabaco, aunque todos los cálculos quedaron por debajo de lo previsto.
Hace un lustro, cuando se acopiaron unas 1362.1 toneladas, la provincia fue desplazada del tercer territorio cubano que más hoja en rama acopia en el país, escalón que ahora consideran retomar en una cosecha que aspira a rendimientos y calidad superiores.