Los resultados positivos de Villa Clara en el control número 85 del Grupo Nacional de Agricultura Urbana y Suburbana demuestran la capacidad de la provincia para sobreponerse a las intensas lluvias y la compleja situación energética del país en el trimestre evaluado, al alcanzar una puntuación incluso superior a la del período anterior.
La garantía de hortalizas para el fin de año y primeros meses de 2020 en la provincia resultó uno de los aspectos a destacar en un recorrido donde los 13 municipios villaclareños consolidaron su evaluación de Bien. Placetas, Santa Clara y Sagua la Grande destacaron por el trabajo en el período, mientras Corralillo, Caibarién y Remedios tuvieron los resultados más discretos.
Como parte de la evaluación, quedaron varias tareas especiales en las que Villa Clara debe trabajar con vistas al siguiente trimestre. Aquí se planteó la necesidad de continuar la recuperación de los importantes organopónicos Las Marianas, a la espera de un nuevo sistema de riego, y La Riviera, que debe incorporar a la renovación tecnológica un cambio en su estética.
En esta plenaria conclusiva también se abordó la necesidad de ganar en la percepción del riesgo del caracol gigante africano en Placetas, zona con mayor presencia del molusco en la provincia, y la necesidad de lograr la integración del grupo que atiende la situación de la especie invasora en el municipio de Camajuaní.
Francisco Martínez Rodríguez, miembro del Grupo Nacional de Agricultura Urbana y Suburbana, también sugirió «dar seguimiento al diseño y montaje de los centros municipales de abono orgánico de Quemado de Gí¼ines y Manicaragua, además de resolver los problemas que tiene la finca de plantas medicinales de Santa Clara ».
A partir del análisis del recorrido surgió, además, una serie de medidas provinciales como el seguimiento a las fincas de semillas y al montaje de dos cámaras frías, así como y controlar el funcionamiento de las dos actualmente montadas; y la incorporación de patios a partir del potencial con que se cuenta y del apoyo de organizaciones como los CDR y la FMC.
Según Martínez Rodríguez, debe prestarse especial atención a la recuperación de áreas para 2020 y al plan de producción de vegetales del año, que se encuentra a un 85 %, aproximadamente, hasta el momento. «La provincia debe hacer énfasis en el municipio de Corralillo, donde se presentan muchas dificultades en la producción de hortalizas », destacó el directivo.

El espacio sirvió para que el Grupo Nacional de Agricultura Urbana y Suburbana reconociera la Parcela Pérez de Prado, en Santa Clara, como Referencia Nacional y a la vinera de Pastor Alba Díaz, en Sagua la Grande, con la condición de Doble Excelencia Nacional.
Bárbaro Monteagudo, vicepresidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular, destacó el esfuerzo de todos los que tienen que ver con la agricultura urbana, suburbana y familiar en el territorio, en un período donde se presentaron condiciones difíciles. «Hay que reconocer al trabajador que está en los huertos y en cada lugar relacionado directamente con la producción », declaró.
Mientras, Francisco Martínez Rodríguez acotó en sus conclusiones: «Creo que los problemas de la provincia son superables. A partir de la situación de los últimos meses con respecto al combustible y otras cuestiones relacionadas, veníamos preocupados a este recorrido por Villa Clara. Sin embargo, los resultados fueron muy buenos, gracias a que nuestra agricultura está destinada a trabajar con recursos locales ».