
En tiempos de estricta observancia a las medidas higiénico-sanitarias para contrarrestar la COVID-19, fuerzas agrícolas de Villa Clara que siembran caña de azúcar no detienen las labores productivas, con el propósito de disminuir los atrasos originados por las limitaciones de combustibles destinados a la preparación de tierra y acarreo de semilla.
Antes que concluya el tercer mes de año, en la denominado época de primavera, habrá plantadas unas 1824 hectáreas, cifra que representa un 46,7% del compromiso para el período, aseguró Amado Cordero López, jefe de atención a productores en la Empresa Azucarera de la provincia.

En la actualidad, siembran la gramínea en suelos del ingenio Héctor Rodríguez (Sagua la Grande) y algunas zonas del Perucho Figueredo (Encrucijada), mientras en Abel Santamaría, de ese último municipio, y José María Pérez (Camajuaní), detuvieron el cultivo al carecer por el momento de abastecimientos de agua provenientes de la presa Minerva (Santa Clara), fuente de abasto que emplean en el riego de los campos.
No obstante esa dificultad, tienen unas 6400 hectáreas en movimiento de tierra y otras 681 están surcadas, y añadió que resguardarán esas áreas, al tiempo que intensifican el uso de la tracción animal para la siembra y las atenciones culturales en los retoños, afirmó.
Dijo que al cierre de junio, la provincia está comprometida con la siembra de unas 11 000 ha, superficie que con el arribo de las lluvias de abril-mayo se completará al incorporarse terrenos altos que proponen para el cultivo de caña.

Resaltó que en los campos se cuenta con la materia prima necesaria para completar en mayo el plan de azúcar de la provincia, ascendente a unas 177 000 toneladas métricas, y también ubican otras áreas cañeras para realizar un aporte superior a esa cuantía.
Cordero López acotó que en los últimos días los ingenios villaclareños reciben unas 16 000 toneladas de caña por jornada y las molidas promedios rebasan el 68 %, válidos para un positivo rendimiento fabril. En el mes entrante auguran terminar con otras 45 000 t de crudo, volumen que permitirá en las primeras semanas de mayo satisfacer el encargo azucarero de la provincia.