
Expertos de primera línea como el profesor Dr. Armando Caballero López, reconocida personalidad de la medicina villaclareña y cubana, y el Dr. Jorge Eduardo Berrio íguila, director general del hospital Comandante Manuel Fajardo Rivero, en cuyas declaraciones se aprecia un fenómeno nunca visto por ellos ni en pandemias anteriores.

Mientras el peligro de la COVID-19 sigue presente, todavía la aglomeración de personas en gran parte de las calles, al menos en la capital provincial, da la impresión de que ninguna de ellas sabe el riesgo que corre.
Vale asistir al segmento de la calle Colón, en los alrededores del Correo Central, la tienda La Reina y el hotel América para apreciar el tumulto, del que no escapa la nueva dulcería ni de otros puntos de la urbe.
En la tarde del miércoles 6 de mayo la prensa tuvo la oportunidad de dialogar con expertos de primera línea como el profesor Dr. Armando Caballero López, reconocida personalidad de la medicina villaclareña y cubana, y el Dr. Jorge Eduardo Berrio íguila, director general del hospital Comandante Manuel Fajardo Rivero, quienes ofrecieron declaraciones sobre el fenómeno del nuevo coronavirus, algo nunca visto por ellos ni en pandemias anteriores.
Jóvenes galenos del referido centro asistencial también brindaron sus opiniones al estar y sentir tan próximos de la muerte de las personas e imaginar que a cualquiera nos puede tocar, porque el coronavirus no tiene rostro ni domicilio. Precisaron que si la gente viviera esta situación de cerca, las conductas serían otras.
La situación en la provincia no está controlada, el riesgo de transmisión sigue vigente en lugares sin condiciones higiénico-sanitarias favorables, a lo que se une el movimiento de personas de un lugar a otro, ajenas a la situación epidemiológica emergente que afronta el país.

Aunque las cifras de casos en Cuba tienden a la disminución y, en parte, resulta estimulante, estamos distantes del triunfo. Villa Clara pasa por momentos de contagio en una enfermedad que transita en poco tiempo desde los síntomas más leves hasta aquellos lamentables que ponen fin a la vida de una persona.
Santa Clara, Camajuaní y Cifuentes prosiguen con el mayor número de casos y de incidencia, aunque los dos eventos de transmisión ocurridos en Camajuaní presentan una situación favorable al no reportarse nuevas notificaciones.
Algo similar a lo que ocurre en el Hogar de Ancianos No. 3, de la urbe santaclareña, con 31 de los abuelos ya recuperados.
El próximo domingo será el Día de las Madres, una jornada diferente porque habrá que cambiar conductas y modificar la expresión de los sentimientos.
Los cementerios de la provincia estarán cerrados, solo abrirán para los servicios de inhumaciones y exhumaciones con la asistencia de familiares muy allegados. Tampoco habrá venta de flores en los alrededores de estos sitios sagrados, y será indispensable el comportamiento individual y la responsabilidad ciudadana.