
Suman ya cinco los casos de COVID-19 reportados en la comunidad ranchuelera de Castaño, en Villa Clara, al agregar otros dos nuevos en el día de ayer.
La comunidad se encuentra bajo un control de foco, según la terminología específica, que se activa de acuerdo con las particularidades de los casos y contempla la adopción de medidas para evitar consecuencias mayores.

Los afectados en esa área son, en su mayoría, familias o amistades con contactos muy directos que parten de dos personas residentes en La Habana Vieja que vinieron de visita a Castaño y aún desconocen la posible fuente de infección.
En la actualidad, las autoridades de Salud vigilan a 129 contactos de esa localidad y se aplican los estudios pertinentes.
Villa Clara acumula 216 personas positivas al SARS-CoV-2, y mantiene la tercera tasa de mayor incidencia en el país y predominio de personas asintomáticas.



Tos, fiebre y secreciones nasales resumen los principales síntomas experimentados por los pacientes.
Los eventos epidemiológicos ocurridos en días pasados en el Hogar de Ancianos No. 3, de Santa Clara, y en el Poligráfico, también de la capital provincial, marchan sin adicionar nuevas incidencias a sus respectivas cuentas y continúa la respectiva vigilancia.
Resulta significativo que el territorio no reporte fallecidos desde el pasado 6 de mayo, y solo existe una paciente de 85 años en estado crítico.
Se hace necesario el estricto cumplimiento de todas las medidas orientadas, pues la epidemia está lejos de poner su punto final.