A 20 años del primer trasplante de médula osea en Villa Clara

En julio de 2000 Villa Clara se convirtió en la primera provincia del interior del paí­s en iniciar los trasplantes de médula ósea. Comenzaba otro capí­tulo para dar vida a la vida.

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Ricardo R. González
Ricardo R. González
@riciber91
1684
19 Julio 2020

Todo comenzó con una  fiebre muy alta que le hizo perder el conocimiento. Después aparecieron frecuentes recaí­das, falta de apetito y mucho decaimiento. Investigaciones  van y vienen hasta que detectaron una afección maligna en los ganglios, provocada por un tumor sólido que comprometí­a notoriamente su vida.

Información sobre el primer trasplante de médula ósea en Villa Clara, publiicada por el periódico Vanguardia.
Así­ reflejó Vanguardia el hecho ocurrido en julio de 2000. (Foto: Ramón Barreras Valdés)

Así­ cursaron siete años en la existencia de Osmany Sabido Dí­az, un joven camagí¼eyano que por entonces contaba con solo 27 años y laboraba en una empresa pesquera.

Se trató en La Habana, en su provincia natal, pero el panorama no mejorarí­a hasta conocer que en Villa Clara iniciarí­a, como nueva modalidad, el trasplante de médula ósea, un procedimiento destinado a restaurar la hematopoyesis o formación normal de la sangre con sus componentes de glóbulos rojos, blancos y las plaquetas.

No lo pensó dos veces y el 10 de julio de 2000 se convertí­a en el primer paciente que inauguraba ese procedimiento quirúrgico en una institución del interior del paí­s.

El salón del área de litotricia extracorpórea, perteneciente al hospital universitario Arnaldo Milián Castro, estaba listo. Allí­ realizaron el acto bajo las más estrictas medidas de antisepsia. Era un trasplante autólogo, realizado por la propia persona, al no estar afectada la médula por la enfermedad de base.

Los especialistas declinaron la anestesia general, y por ser la médula un órgano lí­quido practicaron de 150 a 200 punciones mediante trocares, situados en la región sacrolumbar, para extraer aproximadamente un litro de contenido

Casi al término de la mañana de ese dí­a, Osmany Sabido traspasaba la puerta de recuperación. El proceso devino éxito, y en el acto participó también el colombiano-cubano Rafael Arteaga Morón. Villa Clara celebraba el triunfo junto con la obtención de la sede por las conmemoraciones nacionales del 26 de Julio en ese año.

Camino al andar

Doctor José Luis Aparicio, al frente del equipo que realizó el primer trasplante de médula ósea en Villa Clara.
Dr. José Luis Aparicio Suárez, un villaclareño pionero en la realización de trasplantes de médula ósea en el interior del paí­s. (Foto: Ramón Barreras Valdés)

Para Gardel 20 años no son nada. En el caso del Dr. José Luis Aparicio Suárez, pionero en la realización de esta terapéutica en la provincia y quien encabezara el grupo multidisciplinario  hace dos décadas, constituye un perí­odo de remembranzas, de felicidad y de no pocas incomprensiones.

En la actualidad se desempeña como jefe del Departamento de Posgrado en la Dirección Nacional de Docencia Médica en el Ministerio de Salud Pública (Minsap), y hace unos dí­as regresó al propio hospital que acogió el trasplante para reunirse con sus compañeros y celebrar el acontecimiento con un interesante taller profesional.

«Me inicié en este servicio en julio de 1994 como el primer hematólogo del centro. Aquel propio dí­a los directivos se sensibilizaron con la idea de iniciar el trasplante y convertir a la provincia en la primera del interior del paí­s que lo aplicara.

De la médula ósea

Es un órgano lí­quido diseminado, fundamentalmente, en el interior de los huesos planos como el esternón, las costillas y los correspondientes a las caderas.

Produce los glóbulos rojos, blancos y las plaquetas. Al transfundirse su contenido a una persona enferma, las células sanas se multiplican y restablecen el funcionamiento normal de la médula. De esta forma el trasplante resulta válido para barrer el padecimiento de base y emprender la curación.

Existen tres modalidades de trasplantes: el singénico, entre gemelos idénticos; alogénico (donante y receptor genéticamente diferentes, pero con necesaria compatibilidad de los tejidos) y autólogo, en que el paciente resulta el propio donante.

Entre los padecimientos beneficiados por dicha modalidad figuran los de causa genética, como las inmunodeficiencias congénitas, así­ como en tumores sólidos en los ganglios, el cáncer de mama, de ovario, y el neuroblastoma o masa tumoral exclusiva de la infancia.

No se considera una intervención quirúrgica ni demanda la extracción de ningún hueso ni de la médula. El método sienta sus bases en la aspiración de una parte del lí­quido contenido en esta, su correspondiente procesamiento y posterior inclusión en el receptor.

El autotrasplante (autólogo) se aplica en el tratamiento de diversos tumores sólidos, linfomas y leucemias. Constituye requisito indispensable para el éxito que la enfermedad resulte sensible a altas dosis de quimioterapia o de quimioradioterapia, a fin de que las células malignas puedan erradicarse.

El Dr. Lorenzo Somarriba López, entonces director del centro, me pidió que cuando encontrara allí­ un lugar que le sirviera para la sala le hiciera la propuesta.

No perdí­ tiempo, y en esa propia jornada aprobó el área donde se encuentra el Servicio de Hematologí­a, y se diseñó, desde un principio, con la unidad de trasplantes incluida ».

Aparicio repasa este tiempo. Recuerda que se inauguró el 3 de diciembre de 1996, en lo que él llama una cruzada por la vida.

«Este trasplante precisa sirvió de base para iniciar la medicina regenerativa o terapia celular, en 2004, que se fundamenta en la propia célula madre hematopoyética utilizada en el trasplante de médula con fines de mejorar la calidad de vida del enfermo o lograr su curación ».

Y aunque han pasado los años no deja de sorprenderse con esta realidad. «Una tecnologí­a de punta de paí­ses de alto desarrollo, y tal es así­ que solo tres provincias lo desarrollan: La Habana, que comenzó en 1985; 15 años después lo inició Villa Clara, y Holguí­n, en 2011 ».

¿Cuál ha sido la mayor fortaleza aprovechada en los predios?

Dirí­a que disponer de representantes de multidisciplinas de primera lí­nea porque no se circunscribe solamente a la hematologí­a, y a ello agregarí­a el esfuerzo desplegado, a través del tiempo, por el hospital universitario Arnaldo Milián Castro.

¿Usted es de los que piensan que un solo hombre hace la historia?

Rotundamente no. Nosotros iniciamos la práctica, pero se ha mantenido gracias al aporte de valiosos profesionales que la han continuado y tienen el desafí­o de iniciar el trasplante alogénico a partir de hermanos, otro pariente o alguien que no esté enfermo, y emplear otras fuentes ajenas a la médula ósea exclusiva, como la sangre periférica y el cordón umbilical.

Retorno a las raí­ces

Testigo de la evolución hematológica del territorio es la Dra. Rosa Oliday Rí­os Jiménez. Ahora forma parte de la nómina del hospital Hermanos Ameijeiras, pero trabajó en Villa Clara como jefa del servicio y del grupo provincial de la especialidad de 2006 a 2017, hasta que se trasladó a La Habana.

Doctora Rosa Oliday Rí­os.
«No he perdido el ví­nculo con mis pacientes y mis compañeros de trabajo », afirma la Dra. Rosa Oliday Rí­os Jiménez.(Foto: Ramón Barreras Valdés)

Cierta nostalgia aparece cuando habla de sus compañeros de trabajo de esta provincia, y no la oculta:   «Este (el “Arnaldo Milián”) sigue siendo mi hospital, es mi raí­z, mi fundamento, lo que me maduró para realizar el trabajo en la mejor etapa de mi vida ».

Pero hay más: «Desde que el Dr. Aparicio abrió el Servicio de Hematologí­a siempre tuvo la aspiración   de que los pacientes villaclareños y de la región central tuvieran idénticas posibilidades que aquellos con una mejor posición geográfica, y se logró, sin duda, a través de la historia, lo que deviene fortaleza para el sistema de Salud ».

Entonces evocó los sacrificios que impone iniciar algo nuevo; no obstante, la institución de la provincia resultó la única que encaminó el trasplante de médula ósea fuera del «Hermanos Ameijeiras », el Instituto Nacional de Hematologí­a y el Cimeq, y esa constancia se mantiene en la actualidad como buen regalo para la vida.  

Los nuevos retos

Otras modalidades de trasplantes aguardan, y hasta el momento Villa Clara ha realizado 69 procederes de médula ósea autólogos, algo que resulta en extremo costoso y requiere de condiciones muy peculiares desde el punto de vista de insumos e infraestructuras.

Para la Dra. Agnerys López Sacerio, jefa del Grupo Provincial de Hematologí­a, ha sido un verdadero reto que ya obliga a otras prácticas.

¿Pudiéramos decir que consagración y disciplina aparecen como cartas de éxito?

Constituyen las principales fortalezas unidas a un sistema de Salud vigoroso, que apoya cada acto a favor de pacientes no solo de Villa Clara, sino también del resto de las provincias centrales, junto a la preparación cientí­fica del equipo y el ejemplo que nuestros fundadores nos dejaron.

Sin duda, hay motivos para celebrar estos 20 años de un hito y la solidez de una especialidad que sentó cátedra a partir de las enseñanzas dejadas por la Dra. Bertha Vergara Domí­nguez y continuadas por muchos de sus alumnos.

Que lo digan Marta Beatriz Garcí­a Caraballoso, Tamara Cedré Hernández y Carmen López, entre otros tantos profesionales de primera lí­nea, que hoy la vida les agradece su vocación y aplaude su existencia.

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