Editorial: Crecernos ante los desafí­os

¡Cuánto por delante! Nada será fácil, pero tampoco imposible de conseguir, siempre contando con el pueblo como aliado y constructor del mundo mejor posible que todos añoramos.

Felicitación al pueblo villaclareño

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Redacción digital
2208
01 Enero 2021

Se ha ido el 2020. Un año que hasta el último minuto nos mantuvo en vilo. Un año que nos dejó huérfanos de abrazos y nos llevó de este mundo a seres queridos y personas insustituibles.

Y llegó 2021, con bastantes expectativas, no pocas incertidumbres, y por supuesto, buenos deseos para todos los cubanos y los villaclareños en particular. Porque cada 1. º de enero celebramos el advenimiento de otro aniversario del triunfo de la Revolución,   motivo de júbilo para el que no faltan razones que lo hacen aún mucho más especial.

Con el nuevo año dio inicio oficial la Tarea Ordenamiento, la cual estuvo preparándose durante una década y que debe dar un vuelco radical a la vida económica y social del paí­s. Se trata de la mayor transformación realizada en Cuba en lo que va de siglo xxi, de ahí­ sus retos y desafí­os.

Caricatura de Félix Adalberto Linares sobre el nuevo año 2021 para Cuba.
(Ilustración: Félix Adalberto Linares)

La unificación monetaria y cambiaria, la eliminación de subsidios y gratuidades indebidas, así­ como la mayor autonomí­a que se les concede a las empresas, no traerá la solución de todos nuestros problemas, mas posibilitará un salto cualitativo y una mayor calidad de vida para el pueblo.

El contexto en que se implementa el Ordenamiento es bien complejo, en medio de una pandemia terrible a nivel mundial, el recrudecimiento del bloqueo norteamericano sobre la Isla y una economí­a que vio reducido su crecimiento en un 11 % del Producto Interno Bruto. Mas,   no podí­a continuar dilatándose en el tiempo.

Desatar las fuerzas productivas, quitarle trabas al desarrollo económico, fortalecer la empresa estatal socialista, potenciar el turismo y controlar la COVID-19 son propósitos y objetivos claves a conseguir en los meses venideros y futuros de la nación.

Fidel Castro, cuya obra y pensamiento nos guí­a, hizo notar bien temprano, el propio 8 de enero de 1959, dí­a de su entrada triunfal a La Habana, que quizás en adelante todo serí­a más difí­cil. Y así­ ha sido, pues ninguna revolución verdadera y es la nuestra resulta un camino de rosas.

Como quijotes de estos tiempos hemos tenido que enfrentar y derribar molinos de viento. A no pocos embates nos hemos sobrepuesto y salido fortalecidos.

Este enero nos trae, igualmente, un suceso que por su connotación alcanza repercusión mundial: el adiós definitivo a Donald Trump, el prepotente mandatario norteamericano que tanto daño nos ha ocasionado en un intento más de destruir la Revolución.   Por fin, el miércoles 20 lo veremos partir de la Casa Blanca sin lograr como sus predecesores un sueño que con los hijos de la patria, Martí­ y Fidel, se les ha convertido en pesadilla.   ¡Trump se va, y la Revolución se queda!

El 2021 reafirmará y fortalecerá el rumbo socialista de la nación. Ese que de manera soberana decidimos el 16 de abril de 1961 hace ya 60 años, en ví­speras de la invasión mercenaria por Playa Girón, pues entre los dí­as 16-19 de abril estaremos celebrando el VIII Congreso del Partido Comunista de Cuba.

Los venideros 12 meses serán determinantes. Los ví­nculos entre el sector estatal y el no estatal de la economí­a han de seguir desarrollándose. La industria nacional tendrá que responder cada vez más a la demanda interna. Habrá que avanzar en la eficiencia de los procesos productivos y la calidad de los servicios, así­ como en el ahorro de los recursos, el incremento de las exportaciones, la sustitución de importaciones y la participación de la inversión extranjera directa.

¡Cuánto por delante! Nada será fácil, pero tampoco imposible de conseguir, siempre contando con el pueblo como aliado y constructor del mundo mejor posible que todos añoramos.

En Cuba no habrá terapias de choque, ni aplicación de polí­ticas neoliberales, como auguran algunos. No será el sálvese quien pueda, de otras latitudes. Y si alguien tení­a alguna duda, la decisión de adecuar las tarifas eléctricas, ante el reclamo popular, es prueba fehaciente de ello.

Cuando arribamos al aniversario 62 del triunfo revolucionario es imprescindible evocar la historia, esa gran maestra que nos enseña a rectificar sobre la marcha y a no repetir errores.

En 1891, mientras preparaba la Guerra de 1895, Martí­ pronunció en Tampa dos bellos discursos. El primero pasó a la historia con el nombre de Con todos y para el bien de todos, y el segundo, Los pinos nuevos, en el que afirmó:

«Rompió de pronto el sol sobre un claro del bosque, y allí­, al centelleo de la luz súbita, vi por sobre la yerba amarillenta erguirse, en torno al tronco negro de los pinos caí­dos, los racimos gozosos de los pinos nuevos. ¡Eso somos nosotros, pinos nuevos! »

Con esos pinos, juntos los viejos y los nuevos, contamos para seguir adelante la construcción de un socialismo próspero y sostenible, como nos ha pedido Raúl.

Los villaclareños sabremos estar a la altura de los tiempos que vivimos. Seguiremos siendo vencedores de obstáculos y dificultades, y cada uno de los 365 dí­as del año iremos ante el Che para llevarle resultados y metas concretas; «surcos de fuego y cañas cortadas », como nos pidió el poeta.

No habrá descanso, ni un alto en el camino. Firmes, como quijotes contra molinos, y con la adarga al brazo, seguiremos el camino trazado hace 62 años.

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