
Los nuevos retos de cada día hacen que la comunidad científica villaclareña apenas descanse. A veces, desde el sosegado laboratorio impera cambiar el giro de las investigaciones; en otras, las hipótesis iniciales de un trabajo deben adecuarse a los nuevos tiempos, mientras existen miradas atentas a diversas circunstancias en las que se puede aportar desde la complicidad del intelecto y la entrega.

Ciencia es mucho más que un encumbrado catedrático en cualquier esfera. Pensemos en el innovador que pone sus neuronas en la búsqueda de soluciones, en el hombre del surco que también inscribe resultados y suda por ellos, en el estudiante obsesivo sumado a los hallazgos del bien, o en aquellos trabajadores de servicios que, desde temprano, facilitan las condiciones para lograr el desempeño de la institución.
Todos unidos vencieron un 2020 fatídico, que le cambió los colores al mundo y apagó muchas sonrisas; sin embargo, como fiel e incondicional gremio, el del terruño no abandonó su posición de vanguardia en el país y resultó de nuevo Provincia Destacada en el accionar científico, tecnológico y medioambiental, un resultado que para la Dra. María del Carmen Velasco Gómez, delegada del CITMA en la demarcación, constituyó un período tenso y complicado.
El enfrentamiento a la COVID-19 fue uno de los grandes desafíos. Una enfermedad desconocida, que irrumpió de manera vertiginosa y que, no obstante, posibilitó en Villa Clara la creación de un espacio de intercambio, unidad e integración, reconocido por las autoridades de Salud, al contar con el apoyo sistemático de múltiples profesionales, disciplinas, maneras de hacer y habilidades.
Se trata de «dos subgrupos que buscaron respuestas y estimaciones sobre la pandemia, a partir de los pronósticos de la situación sanitaria por municipios y la predicción diaria de lo que iba a suceder en la provincia », precisa la máxima representante del CITMA en nuestros predios.
Expertos villaclareños formaron parte del equipo que realizó la aplicación de los nuevos protocolos clínicos destinados al tratamiento de pacientes críticos y graves, mientras varios medicamentos de nueva factura utilizados en los primeros momentos fueron validados en el territorio.

Por otro lado, la actual batalla económica deviene objetivo de primer orden enfocado hacia la apertura de nuevos horizontes en los que la investigación científica cuente con un espacio protagónico en cada proceso, aportando innovación, guías para invertir eficientemente, colaborando con la concreción del encadenamiento productivo, la sustitución de importaciones y el fomento de las exportaciones.
Tampoco pueden excluirse el impulso dado al desarrollo local, el enfoque social y las conductas ante un cambio climático que les ha demostrado a los más escépticos la magnitud de sus efectos.
Para la Dra. María del Carmen Velasco será indispensable «elevar la cultura de la innovación como principal problema identificado en Villa Clara, ya que no se interioriza, por parte de muchos, la solución de múltiples inconvenientes a partir de esta fortaleza ».
Aportes, pero sin milagros
Existe una verdad incuestionable: la ciencia aporta, insiste en la búsqueda de soluciones y alternativas, pero no constituye la solución todopoderosa y con efectos milagrosos sobre los tantos problemas a resolver. Es muy larga la cadena de quienes, con su manera de actuar y proceder, llevan cartas en estos asuntos.

Un repaso a lo alcanzado en 2020 señala que de los 781 proyectos en ejecución, 134 están vinculados al desarrollo local, en tanto 228 se asocian a sectores económicos estratégicos como la agroindustria azucarera y no azucarera, la reconversión energética, la industria alimentaria, producciones biomédicas, farmacéuticas y biotecnológicas, sin obviar el área de las construcciones con nuevas tecnologías, la logística hidráulica y las telecomunicaciones, entre otras.
Se trabajó en el Plan de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional, así como en el Programa de Identidad Cultural Cubana y Latinoamericana y en la impostergable conservación de la Memoria Histórica.
Ya concluyeron los nueve estudios de peligro, vulnerabilidad y riesgo (PVR) en materia de inundaciones por intensas lluvias, penetraciones del mar en zonas bajas, afectaciones derivadas de fuertes vientos, incendios en áreas rurales, deslizamientos de tierra y sequías, sin restarle atención al enfrentamiento al cambio climático, acentuado en los siete municipios costeros de Villa Clara.
El apoyo de la ciencia a la economía y la sociedad se traduce en la mejora de pastos y forrajes en Unidades Empresariales de Base (UEB) ganaderas, en la introducción de cultivares de plátanos, de sorgo y caña de azúcar, junto a la producción de semillas de alta calidad y el mejoramiento de las infraestructuras de centros porcinos y avícolas.
Muchos más
Si bien la Universidad Central «Marta Abreu » de Las Villas y sus centros adscriptos contribuyen, de manera notoria, al potencial de la comunidad científica villaclareña, existen otras instituciones con amplias colaboraciones integradas al sistema que no ocupan segundos planos.

Aparecen con espacio y accionar destacado el Instituto de Investigaciones en Viandas Tropicales (INIVIT), la Estación Experimental de Pastos y Forrajes, la destinada a las investigaciones del café, además de la correspondiente a la caña de azúcar (ETICA), junto a GEOCUBA, tres colectivos de la Salud el Cardiocentro Ernesto Che Guevara y dos entidades de la Universidad Médica, y ya se cuenta con la primera dependencia en la rama de la cultura que recae en el Centro de Investigaciones Culturales Samuel Feijóo.
El amplio espectro hace que la provincia resulte, a nivel nacional, la tercera con mayor número de entidades del sector en un territorio que no ha descuidado el seguimiento a las regulaciones de seguridad ambiental, gracias a la valiosa actuación de la Oficina de Regulación y Seguridad Ambiental (ORSA); asimismo, se suman los aportes de colectivos como el Centro de Estudios y Servicios Ambientales (CESAM), el Meteorológico Provincial (CMP) a partir de la efectividad en los pronósticos, la vigilancia y alerta temprana ante el paso de las tormentas tropicales Laura y ETA, y el Centro de Información y Gestión Tecnológica (CIGET), cuyos servicios de asesoría benefician al sector empresarial y no estatal, sin descartar la consultoría ante las demandas de principales programas. .
En el caso de la Oficina Territorial de Normalización (OTN), dicha entidad no incumplió sus compromisos con sectores priorizados como la Salud, la producción de alimentos y la zafra azucarera, a pesar del déficit en la asignación de combustible, unido a las afectaciones derivadas de la situación epidemiológica que limitó muchas de sus labores.
Para no olvidar
El sistema de ciencia villaclareño también presenta deficiencias ¿Cuáles son?:
El impacto de la innovación no completa lo requerido en todos los casos.
La reforestación en la etapa de plantaciones presenta atrasos.
Faltan por cumplir 11 medidas de la visita de la Comisión Higiénico-Sanitaria y de Calidad Ambiental 2019. Así ocurre en la cervecería Antonio Díaz Santana, de Santo Domingo, en la bomba de la Planta ílamo (Camajuaní), el Vertedero Municipal (Santa Clara), la Electroquímica y el matadero Lorenzo González Aguilera, ambos de Sagua la Grande, vinculados a los permisos de vertimiento.
Limitaciones de espacio en el Archivo Histórico Provincial, que demanda la ampliación del inmueble actual, a pesar de encontrarse en proceso de elaboración el proyecto de rehabilitación del nuevo local.
Comunales no ha presentado el plan de inversiones para solucionar las problemáticas de los vertederos.
Párrafo aparte para la creación de la Sociedad de Interfaz de Ciencia y Tecnología (SICTE.SA), perteneciente a la Universidad Central «Marta Abreu » de Las Villas, devenida ejemplo de integración que, en algo más de dos meses de constituida, sobrepasa los dos millones de pesos por concepto de innovación.
El comportamiento de la dinámica demográfica, las tareas para el manejo integrado de la zona costera y la sostenibilidad del vertimiento de arena en seis playas ubicadas en la cayería noreste, el impulso a la Tarea Vida y el desarrollo de 31 ensayos clínicos que benefician a más de 3000 pacientes, también figuran entre los múltiples logros incorporados a la cartera científica villaclareña.
Tampoco escapa la protección del medio ambiente a través de diferentes escenarios y la insistencia en el Comercio Electrónico, con la participación innovadora de la División Territorial de la Empresa de Tecnologías de la Información para la Defensa (XETID) y la Empresa de Informática Citmatel GST Villa Clara, que también aparecen en la diversidad de los aportes durante el año recién finalizado.
Con defectos y virtudes, a sabiendas de que faltan aspiraciones por cumplir y sueños por investigar, lo cierto es que contamos con suficientes fundamentos para afirmar que la ciencia villaclareña transita por los caminos de la vida.