
La fabricación de implementos agrícolas, dirigidos a verificar la calidad de la caña de azúcar que envían las diferentes formas productivas a los ingenios cubanos y decisivos para el pago a los cosecheros, adquiere notoriedad en la División de Talleres Enrique Villegas Martínez, en Santa Clara, territorio en el cual se construyen sondas móviles horizontales y desfribradoras de tallo vegetal de la gramínea.

La entidad, perteneciente a la Empresa Azutecnia, durante el 2020 concluyó 36 equipos de ese tipo, una tecnología que permite diferenciar los sistemas de pago de la materia prima, según calidad, en períodos de corte mecanizado de la caña.

Son aparatos dijo Eduardo Ruiz Benítez, director que de acuerdo con funciones específicas, permiten, después de extraído el jugo de la caña, obtener muestras efectivas para el análisis químico del guarapo y determinar el contenido de sacarosa, fibra e impurezas, así como el rendimiento potencial de la materia prima por campos.
Durante el trimestre concluyen otros tres aparatos destinados a zonas orientales del país y a Cienfuegos, y ampliarán gamas de surtidos de hormigoneras (de tipo hidráulica, convencional-eléctrica y de motorreductores), necesarias en la compactación de la masa vegetal, así como silocosechadores concluyeron unos 250 equipos en el último lustro.
La División de Talleres en Villa Clara, con instalaciones en la cabecera provincial sitio donde asumen un 60 % de las producciones, cuenta, además, con áreas especializadas en Sagua la Grande, Santo Domingo, Zulueta y Placetas, afirmó Ruiz Benítez.
En el aniversario 53 de constituido ese sector industrial, el 24 de marzo de 1968, los 276 trabajadores, sin dejar de observar las medidas higiénico-sanitarias para enfrentar la COVID-19, trazaron metas productivas con el propósito de alcanzar durante el año unos 44 000 000 de pesos en la fabricación de equipamientos, reparación y recuperación de piezas y remolques de camiones empleados por la rama agrícola azucarera.
El pasado año, precisó el directivo, rebasaron el plan de valores, ascendente a unos 16 046 000 pesos, y en la actualidad, aunque están por recibir insumos de importación (mangueras, rodamientos, motores de pizarra, bombas y laminados), prevén ubicar camisas de motores de combustión interna como línea productiva de la entidad.

Con la Tarea de Ordenamiento trazada por el país, los trabajadores se afanan en disminuir los costos de producción y elevar la eficiencia económica, así como las posibilidades de insertar producciones terminadas en mercados foráneos, principalmente con silocosechadoras.
En acto convocado para la ocasión se reconoció a los fundadores y al colectivo villaclareño, considerado líder de las producciones mecánicas del sector, según declaró José Ernesto Aguilera Aguilera, director de la Empresa Azutecnica.

Otros retos quedan por delante, añadió, para contribuir a la modernización de la rama agrícola cubana y abrirse paso en la sustitución de importaciones y los mercados foráneos en terminados que alcanzan elevadas cotizaciones en los campos latinoamericanos.