Dos basamentos primordiales compartieron los asistentes al taller Restauración y protección de la biodiversidad en Villa Clara. Uno, la máxima alerta para evitar que los ecosistemas se degradan a un ritmo sin precedentes en diferentes partes del planeta. Otro, la importancia de convocar a las comunidades locales para una integración urgente a fin de interiorizar la necesidad de preservar la diversidad biológica.
A través de interesantes ponencias se abordaron realidades nuestras en función del bienestar y el equilibrio necesarios, como parte del programa que desarrolla el territorio en torno al 5 de junio, Día Mundial del Medio Ambiente.
Un colectivo de autores del Centro de Estudios y Servicios Ambientales (Cesam) mantiene las investigaciones sobre lo que ha ocurrido luego del vertimiento de arena en playas de la cayería noreste.
Para la máster Leticia Mas Castellanos queda claro que el polo turístico de Cayo Santa Maria no ha quedado exento del deterioro paulatino de las condiciones naturales de las playas y que se ha acudido a su rehabilitación mediante el vertimiento de arena, cuyo proceso exigió 7 000 000 de euros destinados a la compañía extranjera encargada de realizar los procederes.
Por ello no se abandona el monitoreo de la vegetación encaminado a la estabilidad y funcionamiento adecuado de estos litorales, de los cuales hay seis rehabilitados: Perla Blanca, La Salina, Piedra Movida, La Estrella, Caracol y Las Coloradas.
El estudio abarca también las especies de esos entornos, con destaque de aquellas amenazadas, además de las endémicas y exóticas cuya mayor incidencia de estas últimas se aprecia en La Salina.
Los resultados evidencian que esta última, junto a Piedra Movida y La Estrella, mantiene las condiciones necesarias para su recuperación natural del complejo de vegetación de costa arenosa, siempre que se disminuyan las acciones antrópicas (intervenciones realizadas por el hombre) sobre las plantas.
Entre las recomendaciones aparece proseguir con el monitoreo de playas al menos con una frecuencia anual.
En cuanto a la actualización del inventario de biodiversidad del Parque Nacional Los Caimanes la licenciada en Biología, Geidy Cruz Chávez, especialista del Parque, expuso que en la etapa 2006-2011 se reportaban ocho grupos biológicos con 464 especies registradas, y ya de 2017 a 2021 aparecen 12 grupos y 919 especies, con 455 nuevos reportes, entre anélidos, reptiles, mamíferos, esponjas, crustáceos, aves, flora, peces y moluscos, entre otras.
El área marina posee elevados valores naturales y paisajísticos, con extrema fragilidad ecológica y alta diversidad biológica que alberga a diez especies endémicas, 34 éxóticas, y una local: el Hyalina angelquirosis; sin embargo, 45 especies presentan algún tipo de amenaza, entre ellas, el pargo criollo (Lutjanus analis), la tortuga verde (Chelonia mydas) y la torcaza cabeciblanca (Patagioenas leucocephala).
Para el Dr. Idelfonso Castañeda Noa, del Centro de Estudios del Jardín Botánico, perteneciente a la Universidad Central «Marta Abreu » de Las Villas, la provincia dispone de centros de biodiversidad que se convierten en exponentes del patrimonio natural en la región central con alta riqueza y diversidad en especies de plantas y alto endemismo, pero que demandan la actualización requerida.
Sorprende que en medio del marabú se encontrara una variedad endémica de Villa Clara. Se trata de la Elytraria serpens localizada entre la zona de Las Cañas y el arroyo Clarita, en Corralillo, o la estabilidad mantenida por la Magnolia cubensis entre las diez especies endémicas restringidas al macizo Guamuhaya, pero a la vez resultan de interés las sabanas de Manacas con algunas probablemente extintas.
La Restauración Ecológica vista como herramienta eficaz para el manejo de ecosistemas degradados fue expuesta por Domingo Ballarte Denis, director de conservación de Flora y Fauna, a partir de las experiencias de Monte Ramonal, una reserva florística manejada de incalculable valor.
Importante visión que permite con el empleo de diferentes técnicas eliminar las causas de la degradación de un ecosistema y lograr la recuperación paulatina hacia un estado natural o muy próximo a este objetivo.
Las valoraciones del especialista del Cuerpo de Guardabosques, Eddy J. Izquierdo Rivero, en torno a la situación actual de las ilegalidades contra los recursos naturales resultó otras de las temáticas abordadas, mas merece un trabajo aparte producto de su extraordinaria importancia.
Como parte del taller fueron reconocidos algunos de los organismos que sobresalen con sus aportes al medio ambiente. Son estos: el Centro Meteorológico Provincial (CMP), el de Estudios y Servicios Ambientales (Cesam), la Empresa Agroforestal de Villa Clara, el Cuerpo de Guardabosques, el Jardín Botánico de la UCLV, Empresa de Flora y Fauna, Departamento Provincial de Suelos y Fertilizantes, GEOCUBA, ANAP y el Servicio Estatal Forestal.
También se procedió a la premiación del concurso provincial Martí y la Naturaleza, auspiciado por la Sociedad Cultural José Martí, de Villa Clara, dirigido a los niños en las manifestaciones de poesía, narrativa y dibujo.
Entre los galardonados figuró Yadier Cepero Valdés, de la escuela especial Fructuoso Rodríguez.
Al término del taller el máster Edelkis Rodríguez Moya, director del Cesam, insistió en transformar la conducta pasiva de aquellos que consideran los efectos destructivos sobre el entorno como algo irreversible. Acciones progresivas y actuar consecuente es lo que se necesita.