Con 542 villaclareños diagnosticados positivos a la COVID-19, la provincia más central de Cuba vuelve a superar este 3 de agosto la barrera de los 500 casos diarios, cuando no parece tener fin el crecimiento alarmante de la enfermedad en los últimos días.
De los 542 villaclareños enfermos, 538 son autóctonos y 4 importados; estos últimos, 2, de Santa Clara y 1, per cápita, de Caibarién y Camajuaní.
Resalta que el 99,1 % de los pacientes presentan síntomas, según la información brindada por la doctora Gretza Sánchez Padrón, directora provincial de Salud. El municipio cabecera, Santa Clara, a la cabeza del número de infestados con 295; secundado por Manicaragua, que reportó 89; Santo Domingo, con 50; y Sagua la Grande, con 31.
En los restantes municipios, la positividad se comportó como sigue: 12 de Cifuentes, 11 de Corralillo, 10 de Ranchuelo, 5 de Caibarién y Encrucijada, respectivamente, 6 de Camajuaní3 de Placetas, 6 de Camajuaní, 5 de Remedios y Encrucijada, y cierra Quemado de Gí¼ines con 3 casos.
Continúa siendo alto el número de enfermos en edad pediátrica (menores de 18 años), con 182; de ellos, 20 lactantes. De igual manera, continúa elevada la cifra de embarazadas infestadas con 18.
Al cierre de la información había 19 villaclareños en las salas de terapia: 11 en estado crítico y 8 graves. Hubo que lamentar la pérdida de dos vidas: dos personas de Santa Clara y otra de Camajuaní.
Los municipios con mayor tasa de incidencia en los últimos 15 días son: Sagua la Grande con 1409.63, Santa Clara (1366.51), Placetas (754.89), Manicaragua (735.89), Corralillo (691.94), Quemado de Gí¼ines (625.09), Santo Domingo (569.85), Ranchuelo (543.76), Camajuaní (361.31), Cifuentes (357.60), Caibarién (290.12), Encrucijada (203.23) y Remedios (198.42).
La principal autoridad de Salud del territorio continuó insistiendo en las pesquisas, cuya formalidad impide cumplan su verdadero objetivo. También en seguir fortaleciendo las consultas de infecciones respiratorias agudas (IRA) y, sobre todo, garantizar la atención médica diaria al paciente con COVID-19 ingresado en su casa, quienes requieren de obligatoria vigilancia médica.
Al respecto, la población tiene bastantes quejas, pues, en ocasiones, nadie acude a sus viviendas para evaluar la evolución de los enfermos, cuya cifra en la provincia, según dato brindado por el gobernador Alberto López Díaz, supera ya los 1300.
Con relación a la vacunación, ya en su quinto día, luego de iniciada el jueves 29 de julio, se evaluó de satisfactoria su marcha, con más del 50 % de las personas previstas ya vacunadas con la primera de las tres dosis de Abdala.