
Días intensos enmarcaron la visita de trabajo del Gobierno Central en Villa Clara. Los municipios recibieron comisiones y, desde diversos entornos, sirvieron de escenario para la interacción, las experiencias y las perspectivas ciudadanas.
En Manicaragua, el periplo de Antonio Orta Rodríguez, funcionario del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros, incluyó sitios de impacto económico y social, como la Empresa de Producción Local de Materiales de la Construcción (PLOMAC), donde presenció la fabricación de ladrillos e intercambió con dos directivos: Yordani Morales Martínez (municipal) y Jesús Martínez García (provincial). Orta Rodríguez conoció acerca de un proyecto de desarrollo con la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas para construir recursos destinados a viviendas (producción de pisos y losas de techo). El funcionario se refirió a la importancia de acelerar los hornos con leña a corto y mediano plazo.
Asimismo, Orta Rodríguez conversó sobre el encadenamiento productivo con otras formas de gestión. A propósito del funcionamiento de la producción e industrias en general destacó: «Los procesos productivos necesitan organización logística, materia prima y energía». En PLOMAC se dialogó también sobre las ideas de fabricar productos como bloques y vasijas.
Durante el recorrido en tierra manicaragüense, se hizo una visita al productor de tabaco tapado Alecnay Alfonso Díaz. En un ambiente de naturaleza e intimidad, el veguero y su familia dialogaron con Orta Rodríguez, en un encuentro que se desarrolló con la presencia de representantes del sector tabacalero en la localidad.
Más allá de ser un amante del tabaco, Alecnay se declara guevariano desde la infancia. El productor se conmovió al hablar del Che como un gran ídolo : «Me da fuerzas para seguir inspirándome», declaró. Para Alecnay, no hay nada mejor que el tabaco cubano. En su finca se intercambió en cuanto a formas de venta, fines de exportación y reconocimientos a su colectivo, que ha obtenido la condición de Vanguardia Nacional en tres ocasiones. Además, se observaron los locales destinados a la fermentación y otros procesos.
El funcionario Orta Rodríguez también llegó hasta la UEB Multiplicadora El Negrito, unidad porcina que se distingue por su clima familiar de trabajo. Surgida en 1976, la entidad cuenta con extensos locales destinados a la cría y reproducción de cerdos. En conversación con Humberto Reyes Padrón, el director, se trataron aspectos esenciales como la recogida de carne y el cambio en la matriz energética.

Uno de los asuntos más sobresalientes radicó en la obtención del biogás y la tenencia de un biodigestor como planta generadora de esta energía renovable. Al respecto, Orta Rodríguez insistió en retomar un proyecto para la UEB, que genera 400 metros de excreta diariamente, lo cual puede servir de materia prima para producir el biogás. De esa manera, no se contaminaría el manto freático y, además, se beneficiaría a una comunidad vulnerable cercana, El Negrito, con un combustible para la cocción.


La cita de Orta Rodríguez concluyó en la Central Hidroeléctrica Robustiano León, ubicada en Hanabanilla. Allí se reunió con el colectivo laboral y observó los locales destinados a la generación energía. En la institución, la mayor de su tipo en el país, el servidor público recibió detalles sobre la marcha de la unidad que actualmente tributa al Sistema Eléctrico Nacional.
De igual modo, indagó acerca de las colaboraciones con otras empresas y, en diálogo con Ángel Nelvis Pérez Marín, director de la central, conoció sobre vínculos con otras formas de gestión. Orta Rodríguez enfatizó en el rol de los gobiernos territoriales y el Partido en la resolución de problemas. Llamó además a la motivación interna, la organización y el conocimiento, para no tomar decisiones erróneas. «Que estén conscientes y de acuerdo con las decisiones que se toman», sentenció.

Sobre la fluctuación laboral, insistió en que resulta necesario contar con un personal calificado y estimular a los trabajadores con alimentación y otros recursos. A modo de conclusión, se establecieron metas principales: la recuperación de la planta y la permanencia de los trabajadores en la central.